El Ayuntamiento de Vila-real celebra que hace 30 años se convirtió en una administración pionera en la puesta en marcha del servicio de Educación Vial en la ciudad y lo hace con la colaboración de los usuarios del Centro de Educación Especial de La Panderola, que en la tarde de ayer ofrecieron una obra de teatro con el título «La aventura de los invisibles» en el Auditorio Municipal.

La representación contó con la colaboración de la Policía Local y también de los propios docentes del centro, que han preparado la obra durante todo un año junto a los usuarios, quienes sobre el escenario mostraron su sorpresa al intentar realizar un viaje en tren y descubrir que ninguna de las infraestructuras que les rodean están adaptadas.

«Durante la representación, alumnos, agentes y maestros mostrarán sobre el escenario el día a día que muchas personas se encuentran», explicó el concejal de Seguridad Ciudadana y Movilidad, Javier Serralvo horas antes de la celebración de la función. «Con esta obra pretenden abrir los ojos al resto del mundo sobre la importancia que tiene contar con espacios adaptados a personas con movilidad reducida», aseguró el edil y destacó que «algunos subirán con su silla de ruedas al escenario, otros lo harán con otros elementos que forman parte de su día a día».

Mucho por hacer

«Quieren que la gente vea con qué se encuentran a diario, pero no solo ellos, sino también personas mayores o niños y vecinos con un carrito de bebé, todavía queda mucho por hacer para que todo el mundo se sienta integrado y para que este problema no quede condenado a la invisibilidad, de ahí el nombre de la obra de teatro», apuntó.

Asimismo, Javier Serralvo quiso recordar que el programa de Educación Vial, que se implantó de manera pionera en el curso 1986-87 en el municipio, ha formado a más de 80.000 escolares de diferentes edades y etapas educativas «ayudándoles a ser más autosuficientes y concienciándoles de los peligros y las precauciones que hay que tomar para salvaguardar su seguridad» finalizó el edil.