El Villarreal cumple ahora un cuarto de siglo en el fútbol profesional. Su último ascenso a Segunda División se produjo en junio de 1992 y desde entonces ha jugado ochos temporadas en esa categoría y las diecisiete restantes en Primera. Estos veinticinco años han estado marcados por la estabilidad y prueba de ello es que el club únicamente ha tenido dos presidentes, Pascual Font de Mora, con el que subió a Segunda, y de Fernando Roig, al frente del club desde hace veinte años y que ha vivido tres ascensos a Primera.

Desde la campaña 92-93 a la 97-98, el equipo jugó en Segunda y también lo hizo en la 99-2000 y la 2012-13, mientras que en las restantes militó en Primera, donde completó una serie de doce temporadas y ahora lleva una etapa de cuatro. El 28 de junio de 1992, el Villarreal, consiguió el ascenso en La Línea de la Concepción al proclamarse campeón de la promoción de ascenso, que se disputaba por grupos de cuatro equipos y en la que superó a Salamanca, Girona y Balompédica Linense. Aquel Villarreal ya había estado veinte años antes en Segunda, a principio de la década de los setenta, pero no llegó a afianzarse en la categoría.

Durante el último cuarto de siglo, el Villarreal se ha convertido, además, en un equipo habitual en las competiciones europeas, ya que acumula nueve ediciones de la Copa de la UEFA o Liga Europa y tres de la Liga de Campeones. En la Liga española, su mejor registro ha sido el subcampeonato logrado en la campaña 2007-2008 y en Copa del Rey, el acceso en una ocasión a las semifinales. En el capítulo de entrenadores, cabe destacar que fue Esteban Linares el que cogió al equipo en la promoción y certificó el ascenso que se fraguó el 28 de junio de 1992.

El Villarreal ha pasado de los 2.500 abonados de 1992 a los casi 20.000 de la actualidad, ha hecho crecer su cantera, cuenta con dos ciudades deportivas y ha dado un cambio radical a su estadio.