La estación intermodal se levantará finalmente en el entorno del puerto de Castelló frente a la opción de Vila-real. La ubicación de la capital de la Plana es la propuesta que más puntuación ha obtenido en el estudio técnico que ha elaborado la Generalitat, que destaca sus fortalezas en cuanto a la accesibilidad, la viabilidad económica y la superficie logística, entre otras. El puerto de Castelló había anunciado una inversión de 20 millones para la intermodal si se erigía junto al polígono de l Serrallo y la estación está vinculada al nuevo acceso sur del puerto, dos circunstancias que han pesado en el análisis del Consell. Será el propio PortCastelló el que impulse las obras de la intermodal con la idea de finalizarlas en 2020, subrayó ayer el presidente de la Autoridad Portuaria, Francisco Toledo.
La consellera de Obras Públicas, María José Salvador, se reunió ayer con los alcaldes de Castelló y Vila-real para trasladar los resultados del estudio técnico y avanzó que ha convocado a la comisión técnica del ministerio para abordar esta cuestión y dar cumplimiento del protocolo de actuación que existe entre ambas administraciones. La alternativa de Castelló, situada junto al polígono del Serrallo, tiene una extensión de 1,6 millones de metros cuadrados, de los que 300.000 corresponden a la intermodal y 1,3 millones a actividades logísticas, mientras la de Vila-real -junto a la N340- ocupa una superficie de 1,05 millones de metros cuadrados, de los que la terminal acapararía 630.00 y la logística 420.000.
El informe otorga 13,44 puntos a la alternativa de Castelló y 12,85 a la de Vila-real. De las cuatro variables analizadas, Castelló gana en cuanto a disponibilidad de suelo (3,62 frente a 3,13), en accesos viarios y ferroviarios (3,12 y 3,06), y viabilidad económica (2,56 y 2,37), mientras en impacto ambiental queda en primer lugar Vila-real con 4,29 frente a los 4,14 puntos de la capital.
El dictamen destaca de la propuesta de Castelló su mayor amplitud de suelo para instalar una terminal de trenes de 750 metros, su mayor superficie reservada para actividades logísticas, su menor coste de inversión y unas mejores condiciones de la intermodalidad de la carretera y el ferrocarril. Resalta que las infraestructuras viarias de Castelló disponen de capacidad suficiente para soportar el incremento inducido por la plataforma (CS22 y CV183) frente a «una N340 saturada».
Obras, de 2018 a 2020
Una de las ventajas del emplazamiento de Castelló se encuentra en el hecho de que el puerto de Castelló ha reservado inversión para acometer las obras. Los 20 millones previstos están incluidos, además, en el programa de accesibilidad de Puertos del Estado, que cederá un préstamo a PortCastelló a bajo interés para financiar el proyecto. El puerto ha planificado el desarrollo de las obras de 2018 a 2020.
La estación va ligada al acceso ferroviario que conectará el corredor mediterráneo con la dársena sur. En este caso, el fondo de Puertos del Estado ha presupuestado este año un millón para licitar las obras, valoradas en 80 millones. El objetivo es que culminen también en 2020.
Despegue logístico
El puerto confía en que la ejecución de la estación en el entorno del puerto suponga un despegue de las plataformas logísticas proyectadas en las inmediaciones del Serrallo y que llevan años durmiendo el sueño de los justos. Un grupo inversor está la espera de que se confirme el emplazamiento de la intermodal para invertir en Parc Castelló. El informe concluye que una de las oportunidades de Castelló «es la operatividad de acarreos directos con el puerto con tres modos de intercambio: viario, ferroviario y marítimo».
