Es un lujo que el CD Castellón pueda contar con un portero del nivel de Alejandro Zagalá, que la temporada pasada, a pesar de la dictadura del anterior gestor, dio la talla pese a recibir todo tipo de amenazas y descalificativos. El arquero castellonense seguirá siendo el amo de la portería albinegra en esta ilusionante temporada 2017-18 que, oficialmente, arranca este sábado día 1 tras firmar su renovación por una temporada más. «Quería recibir la oferta para renovar ,y afortunadamente, la recibí», confiesa el portero.
La respuesta fue rápida aunque no se formalizó oficialmente hasta principio de semana cuando Zagalá regresó de vacaciones. «A pesar de todo lo vivido y sufrido, ahora con este nuevo grupo gestor quería seguir en el Castellón. Era mi primera opción», asegura.
«Estoy agradecido, contento e ilusionado. Y ahora toca olvidar el pasado. Hay que pensar en positivo, pensar en el presente», explica el portero albinegro, quien añade que «es el momento de volver a estar todos unidos: club, equipo y afición. Antes estaba desunido, estábamos divididos».
El año pasado Zagalá fue uno de los que más sintió en sus carnes la actitud de David Cruz, uno de los peores presidentes que han dirigido las riendas del Castellón. «Como mínimo los futbolistas nos merecíamos el respeto, pero no se nos trató así y ahora llega gente que entiende de fútbol, que se ha comprometido para ayudar al equipo y también a la ciudad», expresa Zagalá, quien termina reconociendo que «el objetivo del Castellón más o menos lo suponemos todos: los que renovamos por este club sabemos que el sueño es ascender. Y eso nunca es fácil, por eso si estamos todos unidos será todo mejor».
Oficialmente, el portero castellonense es el tercer futbolista del año pasado que renueva su contrato con el club de la capital de la Plana tras el capitán Jordi Marenyà y Enrique José Sampedro aunque hay otros futbolistas que están a punto de confirmarse. El siguiente igual es el mediocentro almenarense Ximo Forner y, además, ha llegado al equipo el ondense Luismi Ruiz.
