La parroquia San Vicente Ferrer de Almassora se despertó ayer con el robo de un ordenador y un proyector.

Como informó el párroco, Manuel Martín, los ladrones forzaron la puerta de la parroquia y lograron acceder al interior. La alarma de seguridad comenzó a sonar a las 5.15 horas de la madrugada «pero nadie consiguió ver a los ladrones». Martín informó que fueron sustraídos un ordenador y un proyector «que utilizamos por ejemplo en las misas para niños». La alarma no dispone de cámara de seguridad por lo que no se pudo captar al autor, o autores del robo.

Manuel Martín lleva dos años como párroco en San Vicente Ferrer y, desde entonces «no habíamos sufrido ningún robo», afirmaba ayer.

Sin embargo, este suceso se puede sumar a los robos que se han sucedido en los últimos meses en diferentes lugares de culto de la provincia de Castelló.

Durante este mes de julio, la basílica de Sant Pasqual de Vila-real sufrió el robo del copón con las especies eucarísticas. En este caso, los autores forzaron la puerta de la celda del Santo, sita en la real capilla y abrieron el Sagrario.

Tras este robo, la diócesis Segorbe-Castelló, celebró una misa de desagravio en la misma basílica Sant Pasqual el pasado domingo 23, y tras ello el obispo Casimiro López pidió a los curas que extremaran la vigilancia para evitar más sacrilegios.

Estos actos de profanación se suman al que tuvo lugar el pasado mes de mayo en la iglesia del municipio de Teresa, en la comarca del Alto Palancia, donde fueron abiertos el sagrario y los copones y las hostias fueron esparcidas por el altar y por el suelo.