stuve viendo, como tantos, supongo, el partido que el Villarreal disputó frente al Inter de Milán, que acabó con la derrota del Villarreal por tres goles a uno. Curiosamente los goles del equipo local fueron la consecuencia de errores mayúsculos del sistema defensivo del submarino amarillo. Como es bien sabido, los partidos de pretemporada están para lo que son, preparativos, ocasión para que los técnicos saquen conclusiones de cara al inicio de la temporada que ya está ahí, de modo que sería un error equivocar la mirada solo por los resultados, todos los resultados, aunque tampoco vale ponerse estupendos y decir que n0s era igual quien ganara porque no es cierto. Arriba el Inter hizo daño siempre que se lo propuso, el Villarreal igual de romo que hasta ahora, es decir, mucho, a la espera de lo que pueda aportar Ünal. Algún otro delantero, goleador de verdad de la buena, le vendría a este equipo com caparra en cul de frare y ya ustedes me entienden. Ahora que el mercado ya ha hecho el indio todo lo ya indescriptiblemente aberrante y hablo de los doscientos veintidós millones por Neymar, tal vez les entre un ataque de sentido común y pueda encontrarse el delantero goleador que este clube necesita, para hacer la temporada que la plantilla merece.

El Villarreal ha incorporado a tres futbolistas, independientemente de la contratación de Andrés Fernández, el portero cedido la temporada anterior, ahora del Villarreal de pleno derecho. Está ya muy visto y es un portero eficaz donde los haya. A examen, el central sustituto de Musacchio, el centrocampista Pablo Fornals, sustituto de Jonathan dos Santos más el delantero Ünal. Unos jugaron más tiempo, otros lo hicieron menos, todos cubrieron el expediente. Para la opinión de este cronista, hoy por hoy, los centrales deberían ser los que quedan de la temporada anterior, Fornals no dispone de la versatilidad del mexicano, sobre todo para la pelea en el centro del campo para impedir que el rival encuentre los tiempos y los espacios del sistema defensivo, hasta ahora una de las bases sobre las que los amarillos asentaban su juego. Arriba apuntó maneras muy interesantes el turco Ünal que, con la compañía de Bakambu, puede dar los frutos que se espera de un delantero que costó una pasta, independientemente de los doscientos veintidós millones de euros pagados por los parisinos para la contratación de Neymar. El fútbol europeo se ha salido de madre, la operación Neymar no es sino el cénit de un estado de cosas colosal, por lo que tiene de dañino para el fútbol profesional. Nada va a ser igual a partir de ahora, de modo que tal vez sea llegado el momento de una Liga Europea jugada por equipos multimillonarios, para las teles mundiales mientras todos los demás jugarían las ligas domésticas y aquí paz y después gloria. El dinero de los grandes capitalistas del Golfo Pérsico más los procedentes de los grupos financieros, disputarían la supremacía del fútbol espectáculo/negocio generador de capitales monstruosos al servicio de las apuestas en todo el mundo, y el encanto real de hacer negocios ilícitos, blanqueo de dinero, por ejemplo, incluido, lo que anuncio como riesgo y supuestamente, claro. Real Madrid, Barcelona y Atlético de Madrid participarían de la supuesta Liga Europea, mientras todos los demás nos quedaríamos con el fútbol doméstico. Todo menos vistoso, pero probablemente más emocionante. Una cosa es mojarse el culo para encontrar peces, otra hacerle el juego al gran capital, desbocado, que descubre de pronto no la gallina sino la vaca de los huevos de oro, sin que a nadie parezca importarle un pito, excepto la Liga de Fútbol Profesional que se negó a participar en semejante atropello de la dignidad de lo que algún día fue un deporte.

Para todo lo que envuelve la nueva situación, nacida de la brutal agresión al fútbol profesional ya a punto de fenecer de éxito, lo ocurrido parece una más de las desmesuradas decisiones del mercado, pero es ya mucho más, porque vendrán otras ofertas iguales, parecidas o incluso mejores y a la vez morirán proyectos, realidades concretas, como la del Villarreal de los Roig, que alienta niños para que jueguen al fútbol, chavales que, apuntando maneras, necesitan de profesionales que les enseñen lo que el fútbol puede tener de táctica y estratégica, y antes que eso un deporte que les ayude a crecer también como personas útiles a la sociedad de la que forman parte. Cosas, todas ellas, anteriores y mejores que el deporte del fútbol ayudó a potenciar. Y dejo un ejemplo que explica mejor todo lo dicho hasta aquí: Un día, uno de los chavales llegado desde Madrid hasta la Ciudad Deportiva del Vila-real, tuvo la ocurrencia de abandonar las instalaciones, sin autorización, sencillamente porque sentía la necesidad de visitar a sus padres o eso dijo. Al regreso, se le estaba esperando para anunciarle su expulsión definitiva del proyecto, y si non è vero e ben trovato.