Fue uno de los primeros anuncios realizados por la conselleria de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo tras el acceso del PSPV y Compromís a Generalitat en junio de 2015, pero el complicado entramado legal no ha permitido hasta la fecha iniciar el desmantelamiento administrativo del actual Plan Eólico de la Comunidad Valenciana promulgado a principios del siglo XXI.
La dirección general de Industria y Energía acaba de denegar a la empresa Enel Green Power la autorización administrativa para la construcción de una línea eléctrica que estaba asociada a la evacuación de la energía que deberían haber producido los parques eólicos de las zonas 4 y 5 y su conexión con la infraestructura eléctrica actual.
El Plan Eólico de la Comunidad Valenciana, adjudicado en 2002 por la Generalitat, dividía el territorio en 15 zonas, de las cuales 6 corresponden a la provincia de Castelló, mientras que 5 corresponden a la provincia de València, 4 a la de Alicante. De estas 15 zonas se han desarrollado un total de siete, en las que se han instalado 38 parques eólicos con una potencia conjunta de 1.198 MW, el 5,17% del total estatal, según datos de la Asociación Estatal Eólica, que agrupa a las empresas del sector en España.
No obstante, desde el primer momento la tramitación de la construcción de las líneas eléctricas de evacuación en las zonas 4 y 5 contó con problemas derivados del impacto en el territorio de las estructuras, así como de la incompatibilidad con otros usos.
El paso de las líneas eléctricas coincidía en su trayectoria con el emplazamiento del centro penitenciario Castellón II, situado en Albocàsser. La Sociedad Estatal de Infraestructuras y Equipamientos Penitenciarios alegó que las líneas de tensión impedían realizar las tareas de vigilancia sobre la prisión. En un primer lugar la empresa alegó que el Plan Eólico tenía preferencia administrativa sobre el centro penitenciario por su calificación como plan de acción territorial. Pero la conselleria dio la razón al centro y trasladó a la empresa la necesidad de modificar el trazado. Sin embargo, la empresa nunca adjuntó la propuesta de modificación en el expediente de adjudicación y la conselleria ha utilizado este punto como una de las argumentaciones para denegar la autorización administrativa que se dio a conocer este martes.
La infraestructura de evacuación de la energía generada en los parques estaba compartida en la planificación entre las zonas 4 y 5, por lo que la calificación negativa de la Declaración de Impacto Ambiental afecta a ambas adjudicaciones. Medio Ambiente consideró «incompatibles con los valores ambientales de las áreas afectadas» tanto las infraestructuras eólicas como la oferta de desarrollo de la zona 4, lo que de facto impedía el desarrollo de la 5.
Al mismo tiempo, la infraestructura de evacuación debería de haber conectado son una subestación creada ad hoc y denominada ST Maestrazgo II. Esta instalación no está construida y tampoco está contemplada su construcción en la planificación estatal para el periodo 2015-2020.
Esta resolución que desbloquea la derogación del Plan Eólico valenciano tan solo certifica el desistimiento de las empresas sobre las infraestructuras de evacuación de las zonas 4 y 5. De hecho, la Generalitat ha devuelto desde 2013 las fianzas depositadas por las empresas en relación a la línea eléctrica de evacuación y que suman un total de 5,4 millones de euros.
