Solo dos mujeres conducen dentro de carrera en las tres grandes vueltas ciclistas. No es ni en el Giro de Italia ni en el Tour de Francia sino en LaVuelta a España. Y una de ellas es de Castelló. Como ya sucediera el año pasado, la exciclista profesional Silvia Tirado acompaña desde el pasado sábado a la serpiente multicolor llevando a invitados y patrocinadores oficiales en cada etapa. Una manera de vivir la gran carrera por etapas nacional desde el otro lado de la acción.

El requisito principal para ser conductor o conductora oficial de LaVuelta no es otro que haber sido ciclista profesional para conocer el funcionamiento de la prueba o los peligros de las carreras. «La gran mayoría no sabe lo que significan las banderas de la Guardia Civil o desconocen ciertos aspectos de los que hay dentro de la prueba, como la burbuja del que abre la carrera, el orden de los coches, que nunca te puede pasar el pelotón...», explica la castellonense, llegada a Nimes el pasado jueves junto al resto de la organización, donde arrancó la septuagésimo segunda edición de la carrera española.

La pionera en esta labor dentro de LaVuelta es Dori Ruano, exciclista olímpica y campeona del Mundo y de España en numerosas ocasiones, que cumple su novena ronda como conductora oficial dentro de carrera. Dori fue también entrenadora de Silvia Tirado en un equipo portugués, de ahí que la relación que las une desde hace años hagan más llevaderos los miles de kilómetros que deberán recorrer desde hoy y hasta el próximo 10 de septiembre, cuando la prueba llegue a Madrid.

El día a día

«Los compañeros nos respetan y nos tratan de igual», comenta la castellonense, a quien le hacen especial ilusión las dos etapas que llegarán a la provincia los próximos 23 y 24 de agosto. El año pasado llevó en su coche al conseller de Educación y Deportes, Vicent Marzà, en la subida al Mas de la Costa, pero a día de hoy todavía no sabe a quién llevará en esta edición ya que «dos horas antes de la carrera tenemos que estar disponibles. Es más o menos en ese momento cuando cogemos la comida para los invitados, nos los presentan y quedamos con ellos para iniciar la etapa. Ya en ruta, y siempre conduciendo por la derecha, nos acercamos a los corredores para que se puedan hacer fotos desde el coche si hay visibilidad y no se corre ningún peligro, y los llevamos hasta la meta, siguiendo de cerca la carrera».

Aunque a Silvia Tirado le gusta conducir, la exciclista provincial reconoce que «llevar los coches oficiales es divertido, pero al mismo tiempo cansado y una gran responsabilidad, por eso hay que estar concentrados al máximo desde que salimos para evitar cualquier contratiempo».