El proyecto sobre alimentación «¿Sabemos lo que comemos?» elaborado por los estudiantes de 3º B de Primaria del CEIP de l´Assumpció de la Vall d´Uixó ha sido seleccionado entre 121 participantes como finalista dentro del concurso «I can school challenge» del movimiento Design for Change España, una iniciativa internacional que busca ofrecer a niños y niñas de 8 a 15 años la oportunidad de ser protagonistas de una experiencia para cambiar el mundo. Fue la profesora Inmaculada Font quien a finales de enero propuso a los alumnos hacer este trabajo. «Lo primero era elegir qué era lo que queríamos cambiar y vimos que salió una noticia sobre el aceite de palma y nos plateamos la pregunta de si realmente sabemos lo que comemos», explica Font.

A partir de ese momento, lo niños y niñas, de 9 años, empezaron a investigar y recopilar información sobre los hábitos alimenticios. Durante esta fase, los escolares conocieron que las grasas saturadas son perjudiciales para salud, que el aceite de palma tampoco es saludable y que hasta alimentos tan cotidianos como el colorante contienen componentes químicos. Incluso entrevistaron a Salvador Aznar y Gloria Pascual, los investigadores del Instituto de Investigación Biomédica (IRB) de Barcelona que relacionaron el consumo de aceite de palma con la metástasis, y llevaron a clase alimentos que se consumen en sus casa para saber si se estaban alimentando correctamente.

Con el planteamiento de base y el proceso de investigación concluido, los alumnos de 3º B de Primaria se pusieron manos a la obra y diseñaron carteles en los que se explicaban los últimos avances científicos, se clasificaban los alimentos saludables y los que no lo son y se reforzaba la importancia de leer las etiquetas de los productos. Para completar esta fase de difusión, los estudiantes tomaron las calles para hacer encuestas, informar de lo que habían aprendido y mostrar a la ciudadanía la importancia de llevar una dieta sana. También informaron a todos los niños y niñas de la escuela de lo que era saludable y lo que tenían que evitar comer.

El último eslabón de este proyecto era conseguir un cambio, y lo lograron. Que el menú escolar no tuviera colorante alimenticio, que los establecimiento vendieran gusanitos sin aceite de palma y que los padres adquirieran productos más saludables son algunos de los grandes logros conseguidos a través de esta innovadora propuesta. Por todo ello, estos niños han sido merecedores de pasar a la final del movimiento Design for Change España junto a otros proyectos de colegios de Salamanca, Toledo, Madrid, Zaragoza, Barcelona, Valencia y Murcia. Todavía no se conoce la fecha en la que se dará a conocer el ganador pero en noviembre tendrá lugar en Madrid la gala, a la que los alumnos de 3º B de Primaria esperan ir como vencedores.