El Partido Popular de Castelló mantuvo ayer un encuentro en el Hospital de Vinaròs para denunciar la existencia de supuestos recortes en materia sanitaria por parte del Consell. En el encuentro participaron los dirigentes del PP de la Comunitat Valenciana y Castelló, Isabel Bonig y Miguel Barrachina. La directora territorial de Sanidad en Castelló, Azucena Martí, lamentó que los populares eludieran comunicar su presencia a la dirección del centro. Afirmó que habría organizado una visita a la comitiva popular para mostrar «las inversiones que hemos realizado, sobre todo en equipos y tecnología puntera, la dignificación de espacios asistenciales, la ampliación de zonas de trabajo para mejorar la actividad de los profesionales sanitarios, la incorporación de nuevos servicios como la UHD o la construcción de nuevos centros de salud en el departamento.

Martí señaló que Bonig se presentó ayer por la mañana en el Hospital de Vinaròs «sin tener la cortesía de comunicárselo ni a la gerente ni a ningún miembro del equipo directivo».

«Tanto yo como la gerente Ana Arizón, hubiéramos estado encantadas de guiarla por el hospital y mostrarle de primera mano el nuevo mamógrafo digital, la renovación de la central de esterilización, el láser holmium para el tratamiento de las litasis renales, el nuevo vídeo colonoscopio para la implantación del programa de prevención de cáncer de colon que todavía no estaba activado en este departamento con la consiguiente pérdida de derechos sanitarios de sus habitantes o los motores quirúrgicos renovados del servicio de Traumatología», entre otras mejoras.

La directora territorial de Sanidad también mencionó otros avances como «el material para artoscopias, la sustitución de material informático que nos encontramos obsoleto, el equipo de vídeo nistagmografía necesario para el servicio de Otorrinolaringología, el avance de las obras de nuevos dormitorios para dignificar el descanso del personal de guardia, la construcción de baños adaptados a minusválidos, los nuevos paneles para Radiodiagnóstico, las torres de laparoscopia y los equipos de anestesia para los quirófanos, la renovación de la señalización del hospital, los taburetes de parto, las unidades de ventilación con presión positiva no invasiva, los trabajos de reparación de camas de los pacientes hospitalizados, muchas de ellas en estado lamentable, mejor material para la movilización de pacientes, que no existía en este hospital, las obras para humanizar la sala de pediatría y el hospital de día infantil, que cuenta ahora con dos equipos de alto flujo pediátrico, muy necesarios, o los ecocardiógrafos que reclamaban los servicios de Cardiología, Obstetricia y Cirugía General». «Inversiones que superan el millón de euros y que demuestran que el Hospital de Vinaròs era un hospital olvidado y que en la sanidad del PP había ciudadanos de primera y de segunda», abundó Martí.

En cambio, Barrachina aseguró que el Ejecutivo popular invirtió en la última ampliación del hospital de Vinaròs más de 10 millones de euros en 2015 con una tercera planta, servicio de urgencias y ampliación de servicios y «hoy, dos años después, mantienen el hospital bajo mínimos incluida la falta de personal mientras incrementan el personal eventual de los consellers». El PP denunció «ajustes en sanidad» mientras se «gastan 48 millones en la tele Oltra».