La startup valenciana Solatom reduce el coste económico y ambiental que supone para las industrias la generación de calor a través de energías renovables gracias a la creación de módulos solares transportables, competitivos y rápidos de conectar. El invento de Solatom permite instalar plantas solares para su uso en industria, a partir de módulos pequeños transportables (y reubicables). Estos módulos se fabrican en serie, lo que permite aumentar su competitividad, y posteriormente se transportan al cliente industrial listos para su uso. Centralizar la construcción ha permitido a la startup valenciana conseguir periodos de retorno de tres años, frente a los ocho de una instalación tradicional de este tipo.

Con este sistema se produce calor de las mismas características que el generado en las calderas tradicionales, pero reduciendo el coste de generación en un 35%.