No ha llovido, pero ha pasado una especie de ola de frío polar que la semana pasada dejó huella en la provincia desde el último partido del CD Castellón en el Estadio Castalia. La última vez que la afición albinegra vio a su equipo en casa el disgusto, combinado con el cabreo, acabó con la destitución del anterior entrenado Frank Castelló. Fue después de empatar in extremis contra el Olímpic (1-1). De ello hace casi un mes (12 de noviembre).

Y hoy es jornada de estrenos en el feudo castellonense en el atractivo partido contra el desinflado La Nucía, que ya no es líder y acude como tercero de grupo. Será el debut de Sergi Escobar y de su ayudante Héctor Mohedo. Dos grandes albinegros que cumplen el sueño de tomar las riendas del primer equipo. En el caso de Mohedo fue de los que tiró del carro en aquellos larguísimo años en Segunda B de mediados de los noventa y primeros del siglo XXI.

Será su cuarto partido al frente del Castellón, porque los tres primeros encuentros fueron como visitantes ante el Novelda (0-3), Borriol (2-2) y Recambios Colón (1-4). Hoy vivirán un día especial porque se sentarán en el banquillo local de Castalia y ante más de siete mil albinegros en la grada. Enfrente un duro rival que, pese no atravesar el mejor momento, viene con todo su arsenal, una plantilla de lujo. El nuevo inquilino del banquillo albinegro quiere presentar el once con los mejores después de tres semanas repartiendo minutos para calibrar qué le puede dar cada uno de los componentes del equipo.

La Nucía llega con todo. En sus filas milita, desde hace mes y medio, un delantero con pasado albinegro como es el espigado ariete valenciano Raúl Ivan Fabiani, que disputó cinco de los seis partidos del play off de ascenso, con tres goles, tres amarillas y un total de 356 minutos jugados. Alto y efectivo en el juego aéreo. Como peligroso es el delantero del equipo alicantino Diego Ruiz,que acumula trece goles en su casillero.