El delegado de Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Moragues, ha hecho balance de las ayudas concedidas por el Gobierno central a la Comunitat Valenciana este año para restaurar las zonas afectadas por los grandes incendios forestales de 2016 y 2017 en la Comunitat Valenciana. «En total el Ejecutivo de Mariano Rajoy ha destinado este año 850.000 euros con el objetivo general de paliar los daños derivados del incendio y evitar los posibles futuros desastres, que pueden acrecentarse con la llegada de las precipitaciones torrenciales de otoño e invierno», ha destacado Moragues.
La provincia de Castelló ha concentrado más de la mitad de las ayudas. 450.000 euros para los incendios forestales de Artana, Alcudia, Segorbe y Altura que afectaron a un total de 2.715 hectáreas, una superficie ocupada en su mayoría por pinares de pino carrasco.
Para el incendio forestal que afectó a los términos de Artana, Alcudia de Veo, Eslida y Tales se han invertido 150.000 euros, y al incendio forestal de junio de 2017 en Gátova que afectó a los términos de Segorbe y Altura, se está invirtiendo 300.000 euros.
Este año se han registrado en la Comunitat Valenciana 28 incendios con una superficie afectada 1.350 hectáreas frente a los 57 incendios de 2016 que llegaron a afectar 6.796 hectáreas, lo que implica una reducción de un 81% de la superficie quemada en el territorio valenciano.
De las 8.146 hectáreas afectadas en 2016 y 2017, 7.352 hectáreas, el 90% se produjeron en los grandes incendios forestales de Segorbe-Gátova, Artana, Bolbaite y Benitatxell.
En concreto, los trabajos que se están ejecutando consisten en minimizar la pérdida de suelo a través del control de posibles procesos erosivos debidos a la escorrentía, principalmente mediante la construcción de fajinas. Se trata de estructuras de freno de erosión y retención de suelos donde el material de base para esta sujeción es el directamente afectado por el incendio forestal.
También se pretende posibilitar la estabilización de cauces mediante la construcción de albarradas de mampostería en seco en los cauces, con la función de barrera transversal para el control de la velocidad de la lámina del agua en avenidas. Funcionarán como diques con función de sedimentación de acarreos, freno de la pérdida de suelo y control de los procesos erosivos y estabilización de laderas de cauces.
Otras labores están relacionadas con la recuperación de bancales existentes para mejorar la sujeción de los mismos frente a los procesos de precipitación de agua de lluvia, así como trabajos selvícolas, principalmente apeo, desramado y tronzado con objeto de favorecer la recuperación de la masa forestal, disponer de material para la elaboración de fajinas y evitar el riesgo de caída en pistas forestales de pies muy dañados.
