Los problemas se le acumulan a Ruben Semedo. Mientras el central del Villarreal se recupera de una lesión de la que fue intervenido el pasado mes de diciembre, una nueva agresión cometida por parte del jugador del equipo villarrealense sale a la luz y pone en el disparadero al portugués.

En apenas una semana se han hecho públicas hasta dos denuncias diferentes supuestamente cometidas por Semedo en sendas discotecas de València. En la primera de ellas, de la que se tuvo constancia la pasada semana, el jugador habría sacado un arma para amenazar a otra persona tras una discusión. Por esta agresión la Fiscalía pediría dos años de cárcel para el portugués.

Pero en las últimas horas la Cadena Cope València ha sacado a la luz la denuncia tras otra pelea en la que se habría visto implicado el jugador.

Esta habría tenido lugar el pasado 29 de octubre, pasadas las siete de la mañana, en el parking de una discoteca de la capital del Turia. Según la denuncia, Semedo se había visto implicado en una discusión en el interior del recinto que no habría ido a más al haber intercedido amigos que acompañaban tanto al propio futbolista como a la supuesta víctima a quien habría proferido insultos de diversa consideración sin motivo aparente.

La situación se normalizó y ambas partes compartieron charla y bailes en la discoteca. Pero cuando pasadas las siete de la mañana Semedo decidió marcharse a casa, invitó al joven a que le acompañara al parking con el fin de regalarse una camiseta de su equipo, según consta en la denuncia. Aunque en un primer momento el joven le dijo que no hacía falta porque no había pasado nada más, Semedo insistió en que le acompañara en tono de disculpa.

Sin embargo, al salir a la zona del aparcamiento del céntrico local de València, Semedo se habría sacado una botella de cristal del bolsillo y habría agredido en la cabeza al chico que le acompañaba, dejándolo conmocionado.

«El golpe fue ligeramente mitigado por la acción de uno de sus amigos que metió un brazo por medio y consiguió atenuar la fuerza que llevaba el mismo, pero no impedir que me diese un contundente golpe con el botellín en la cabeza», recoge la denuncia.

Tras este momento, y al poder recuperarse, el joven llamó a la Policía Nacional para pedir auxilio ya que la actitud de esa persona «se tornó agresiva, llegando a coger una piedra con la intención de lanzármela, si bien finalmente no lo hizo».

El Villarreal esperará a que se produzca el correspondiente juicio y haya una sentencia antes de realizar cualquier valoración pública de lo acontecido.