El temporal de nieve remitió ayer por la tarde tras teñir de blanco el interior de Castelló, dejar intransitables decenas de carreteras, atrapar a centenares de camiones en la A-23 y cerrar centros educativos en els Ports, Alt Maestrat, Baix Maestrat y Alto Palancia.

Y es que si la nieve es un enemigo poderoso puede llegar a ser terrible si llega con viento. Ayer el viento y la nieve fueron protagonistas en todo el interior castellonense y los equipos de las máquinas quitanieves sufrieron para limpiar las carreteras y accesos a los municipios debido a la acumulación de grosores que, en algunos puntos, superaban el metro. Las quitanieves limpiaban y el viento se encargaba de devolver la nieve a las carreteras. Las carreteras se abrían y cerraban. A media tarde se cerraba al tráfico la CV15 entre Vilafranca y Ares por los «ventisqueros». Y es que los del lugar saben que en Cabestany se forman grandes acumulaciones de nieve. Lo mismo sucedió en las proximidades del Port de Sant Pere de Castellfort, el puerto de las Cabrillas entre La Iglesuela y Portell y en todos los viales de la Tinença de Benifassà.

Las inclemencias meteorológicas también afectaron al transporte y los vehículos pesados estuvieron restringidos durante toda la jornada. El día amaneció con las carreteras limpias, pero la intensa nevada que dejó nieve en polvo y el viento se encargaron de complicar la situación de manera notable. A pesar de la intransitabilidad, no hubo incidencias notables en las carreteras, a excepción de los camiones que estuvieorn parados en la zona del Alto Palancia.

Por otro lado, en Ares en torno a 20 masías quedaron aisladas y en el interior de los pueblos limpiar las calles suponía cambiar la nieve de sitio, ya que el viento no paraba. En Vilafranca el ayuntamiento, siguiendo el plan de anteriores nevadas, activó a las palas disponibles en la localidad para limpiar las calles.

Desde el consorcio provincial de bomberos indicaron que durante el día de ayer actuaron un total de 14 máquinas quitanieves, y 150 efectivos, así como vehículos auxiliares y saleros, en las más de 60 rutas de viales que tienen asignadas el Consorcio, y trabajaron de norte a sur de la provincia.

En cuanto a las temperaturas, las mínimas rondaron ayer los 3 grados negativos en todo el interior y las máximas fueron negativas.

Seguirá el frío

Y el frío no ha venido de paso por la Comunitat Valenciana, sino que ha llegado para quedarse, al menos durante lo que queda semana. Es más, pese a que el riesgo de nevadas cesó durante la tarde de ayer, se esperaba que el mercurio descendiera durante la madrugada de hoy hasta incluso un grado bajo cero en puntos del litoral.

El frío también se sintió ayer y la nieve se pudo llegar a ver en el Desert de les Palmes y en poblaciones la Mancomunidad Espadán-Mijares, como Villamalur, sin llegar a cuajar dentro de la población, aunque sí en la zona montañosa de alrededor. En Torralba, los tejados empezaron a cubrirse de blanco, al igual que la carretera entre Argelita y Lucena.

El delegado del Gobierno, Juan Carlos Moragues, declaró ayer por la tarde que la Emergencia declarada el martes por nevadas había finalizado.