El Real Madrid se impuso al Getafe con un juego gri gracias a la pegada de Gareth Bale y Cristiano Ronaldo antes de visitar al Paris Saint-Germain, frente a un equipo azulón que jugó con diez toda la segunda mitad. Bajo la constante lluvia, el galés y el portugués, que anotó un doblete, intentaron solventar antes del descanso un encuentro en el que los blancos apenas generaron ocasiones. Dos tiros a puerta fueron suficientes para encarrilar el choque en la primera mitad.

A pesar del bajo rendimiento sobre el césped, la pólvora madridista funcionó a la perfección, algo poco habitual durante el curso. Después del primer aviso de Ángel para los azulones, Bale cazó un rebote en el área para poner por delante a los suyos contra una de las mejores defensas de LaLiga Santander. El gol dio tranquilidad a los merengues, que tampoco recibían llegadas de un plantel getafense replegado. Al borde del descanso, Karim Benzema y Cristiano Ronaldo rompieron el sopor levantando a la grada con una buena combinación. El francés vio el desmarque del portugués al espacio y el luso, después de amagar, disparó para duplicar la ventaja. En la segunda mitad, la temprana expulsión de Loïc Rémy por doble amarilla tras un golpe a Nacho, dejó una sensación de tranquilidad. Pero una acción entre Nacho y Jorge Molina en área blanca acabó generando un polémico penalti que dio emoción al partido. El tanto azulón reactivó a los blancos, que finalmente respiraron gracias a otro gol de Cristiano.