El Grupo Municipal Popular recuerda que el Tribunal Supremo ha dado la razón al PP al retrotraerse a la ordenanza municipal de marzo de 2012, la cual considera a las Tascas zona excepcional y tradicional donde se permite el consumo de bebidas alcohólicas, excluyendo a sus calles de la prohibición general de consumir bebidas alcohólicas en la vía pública. La portavoz popular, Begoña Carrasco, explica: «En 2012 se dieron los primeros pasos para dotar de singularidad a las Tascas, hoy estamos más cerca de conseguir este objetivo. Las Tascas son un espacio de especial tradición gastronómica y de ocio que debemos mantener, siempre buscando la mejor manera de conciliar ocio y descanso».

«El compromiso y el trabajo del anterior equipo de gobierno, con el concejal de sostenibilidad Gonzalo Romero al frente, ha de tener continuidad con la modificación de la Ley de Salud Pública autonómica».

Los populares han presentado una propuesta de modificación a dicha Ley para que se permita el consumo de bebidas de menos de 20 grados en espacios tradicionales, como son las Tascas, con el fin de preservar la actividad turística y de restauración, y deriva las competencias a los Ayuntamientos para establecer horarios, condiciones o delimitar espacios.

No obstante, Carrasco entiende que esta tregua del Supremo no acaba con la problemática para las Tascas y las terrazas de alrededor. Los hosteleros siguen temiendo pérdidas por las estrictas medidas de la zona ZAS -que ha impuesto el bipartito-, que les obliga a no consumir alcohol a partir de las 22:00h en las calles de las Tascas o a recoger las mesas a las 22:30h.

«Ayer [el miércoles para el lector] concluyó el plazo de alegaciones a estas restricciones, desde el Grupo Municipal Popular hemos presentado una batería de razones por las que entendemos que las medidas impuestas por el bipartito no son las adecuadas, atacan a la tradición, al turismo, a la gastronomía y se lo ponen cada vez más difícil a quienes crean empleo. El cierre de terrazas a las 22.30h. es inimaginable en otras ciudades como la nuestra, donde la climatología propicia la actividad en la calle y se potencia este atractivo, buscando conciliar ocio y descanso», concluye Carrasco.