La concejalía de Servicios Públicos continúa realizando nuevas actuaciones dentro del Plan municipal de mantenimiento de vías urbanas y caminos rurales. Tras los primeros trabajos de asfaltado, realizados en el camino Vora Riu y en los viales Molí Bisbal y Comte de Ribagorça, a lo largo de esta semana se han realizado nuevas intervenciones centradas, específicamente, en la avenida de Pío XII y los cruces con diversas calles adyacentes. Así, se ha actuado en los tramos con mayor desgaste y que coinciden con puntos donde los vehículos se incorporan a la avenida o salen de ella, como son la calle Benedito, Furs de València, Josep Ramón Batalla o la calle València.
«Se trata de un trabajo delicado, ya que esta es una de las vías principales de la ciudad y se ha intervenido manteniendo la circulación, lo que ha supuesto un gran esfuerzo de coordinación con el tráfico rodado para evitar situaciones de peligro y retenciones», afirmó el edil de Servicios Públicos, Francisco Valverde, quien destacó la colaboración de la Policía Local. Desde la Avenida Pius XII, las máquinas han pasado a diversos puntos de la avenida de Italia y Bélgica, donde termina esta fase, que continuará tras la Semana Santa con los trabajos de reposición de pintura de señalización vial.
Asimismo, Valverde informó que durante este mes de abril también comenzarán los trabajos de mantenimiento de caminos rurales, dentro del Plan 135 de la Diputación de Castelló, para lo que llegarán nuevos equipos de asfalto que se centrarán en los caminos Molí Paquero, Sant Jordi, La Roqueta, Na Boneta y Tercer Sedeny, entre otros. Los trabajos de mejora y acondicionamiento afectan a una docena de caminos rurales del término municipal, con un total de 5,6 kilómetros de longitud.
Cristo de la Penitencia
Así mismo, la concejalía de Servicios Públicos de Vila-real ha finalizado también los trabajos de acondicionamiento de la calle Cristo de la Penitencia en el tramo comprendido entre los viales Virgen de los Dolores y Zumalacárregui.
Las obras, ejecutadas por una empresa local, han contado con un presupuesto de 53.714 euros, que han servido para la renovación completa de las aceras, que se han ensanchado para garantizar la seguridad y comodidad de los peatones.
Aprovechando la intervención, se ha acometido la sustitución y renovación completa de las canalizaciones de agua potable y de los imbornales de recogidas de pluviales y se han colocado nuevos registros de alcantarillado. También se han solucionado problemas históricos de asfaltado, eliminado surcos entre el bordillo y la calzada y se han construido cuatro pasos accesibles.
El concejal de Servicios Públicos, Francisco Valverde, explicó al respecto que «era preciso actuar para garantizar que las aceras de esta calle, que eran muy antiguas, cumplieran con el ancho normalizado» y destacó para ello la creación de cuatro nuevos pasos adaptados.
