El Ayuntamiento de Alfondeguilla procedió ayer a dinamitar una piedra de 4.000 kilos que estaba en la montaña junto a la carretera CV-230 y que según el alcalde, Salvador Ventura, «podía suponer un peligro para peatones y conductores si la piedra acaba cayendo sobre la carretera».

Así, el consistorio, tras pedir los permisos a Subdelegación del Gobierno y a Carreteras de la Generalitat Valenciana, contrató a una empresa especializada para proceder a la explosión controlada de la piedra. Estos trabajos han supuesto un gasto de 5.000 euros que asume por completo el Ayuntamiento de Alfondeguilla, después de haber acudido a diferentes administraciones.