Fuera de casa, donde tanto le cuesta ganar al Villarreal C, perdió ayer por goleada. La Nucía, uno de los equipos con mayor presupuesto de la categoría y con gente de muchísimo nivel, no se fue con contemplaciones y al descanso dejó el partido visto para sentencia con el 4-0 que campeaba en el luminoso. Un filial con poca chispa y un centro del campo sin sus principales líderes, naufragó y posiblemente dio el definitivo paso atrás para olvidarse de alcanzar la cuarta plaza.

No pudo empezar peor el partido para el equipo de Pere Martí. A los ocho minutos Jandro adelantó a los nucieros en el marcador. Un gol de calidad. Sin apenas ángulo y con el exterior de la bota alojó el balón allá donde nada podía hacer el joven arquero internacional Marc Vidal. Fue el inicio del desastre. Antes de llegar al descanso cayeron otros tres goles, de todas las formas posibles.

Amplió la ventaja Gabri Sarasol en el minuto 19, que a placer remató un buen centro de Jandro. El tercero al filo del descanso (minuto 39) y llevó el sello de José Sánchez, con la zurza y en jugada de pizarra tras un saque de banda. Y quizá el cuarto es el que menos dolió. Lo firmó el goleador local Diego Piquero (min. 44).

Después de leer la cartilla el entrenador a sus pupilos en el descanso, el Villarreal C salió como una moto. Dani Villanueva recortó la diferencia tras un mano a mano por el portero. Sin embargo, pese a la mejoría amarilla, ya nohubo más goles.