El Grupo Municipal Popular ha presentado 45 alegaciones al Plan General Estructural en función de 5 errores estratégicos detectados: la drástica reducción de suelo industrial; la inseguridad jurídica en Crémor; la situación en que quedan los grupos periféricos; las infraestructuras que son vitales para la ciudad y el trato desigual en las viviendas de la Marjaleria.

A raíz de este último, la portavoz popular, Begoña Carrasco, explica que el planeamiento urbanístico del bipartito, lejos de dar una solución global y de integración a la zona de la Marjaleria, crea situaciones de indefensión y vulneración de derechos, porque «ante viviendas y terrenos iguales (tienen los mismos servicios de suministro, el mismo acceso rodado. Etc.), se les da una clasificación de suelo distinta».

«Hasta ahora el Plan General no ha justificado el por qué da un trato diferenciador a los terrenos de estos propietarios. Por eso, el 60% del total de las alegaciones que se han presentado al Plan General, no sólo las del PP, vienen motivadas por la clasificación de suelo», añade la portavoz del PP.

«No entendemos qué intereses defiende el bipartito (PSOE y Compromís), ni tampoco su socio Castelló en Moviment-Podemos, a menos que sean los suyos propios, ya que se ha comprado una casa en la Marjaleria. Primero presumen de los 2 años de negociación con PSOE y Compromís que han dado como resultado la redacción del documento urbanístico conjunto y, ahora, presentan 25 alegaciones al planeamiento que ellos mismos han diseñado, se alegan a ellos mismos, evidenciando una incoherencia absoluta», explica Carrasco.

Por otra parte, las propiedades sin edificar en la Marjaleria son clasificadas como suelo rural, mientras que algunas de las edificadas obtienen la catalogación de suelo urbano residencial. «Con este modo de proceder se premia a quienes construyeron sin que pudieran hacerlo y se castiga a quienes cumpliendo la legalidad decidieron no construir.

Carrasco recuerda que ya se aprobó un Plan Especial de la Marjaleria, que contó con el respaldo de los propietarios de la zona, «y teniendo en cuenta que el bipartito sí ha respetado otros planes especiales, como el de la Universidad o el Puerto, creemos que la mejor opción es mantenerlo e integrarlo en el Plan General que está ahora mismo en fase de elaboración».