El cuadrante seis del Cementerio Municipal de Borriana es desde ayer, 14 de abril de 2018, día de la proclamación de la Segunda República Española, un lugar más digno y representativo de la historia de la ciudad, después de que haya tenido lugar el acto oficial de homenaje a las 55 personas que sufrieron y pagaron con sus vidas la represión franquista. Es en ese cuadrante donde se enterró a algunas de las personas fusiladas y torturadas en la antigua prisión de La Mercè o que murieron en el hospital tras ser apalizadas y «paseadas» por las calles del centro de la ciudad.
Así lo recordaron alguna de las más de 200 personas asistentes al acto de ayer, que pudieron expresar sus sentimientos o sus agradecimientos a través del micro. Tras esas palabras iniciales, Aina Monferrer, en representación del Grup de Recerca de la Memòria Històrica de Castelló, repasó el trabajo que desde el mismo Grup o colectivos como la Escletxa de Borriana se ha realizado en las últimas dos décadas para alcanzar la «verdad, justicia y reparación de la dignidad y la memoria de estas víctimas del franquismo, y que durante demasiado tiempo ha sido silenciada y olvidada en esta ciudad».
A continuación, Isabel Marín, nieta de Manuel Marín Falcó, vecino de Vilafranca fusilado en la capital de La Plana Baixa, recordó la historia de su antepasado, explicando las vejaciones, mentiras y falta de todo tipo de derechos que sufrió su abuelo en los meses previos a su fusilamiento.
Por último, la alcaldesa de Borriana, Maria Josep Safont, tomó la palabra, y haciendo referencia a las III Jornades Memorial Democràtic de Borriana en las que se enmarca este homenaje, «este monolito simboliza, precisamente, el espíritu democrático en que se basa esta recuperación de la memoria y el homenaje a todas aquellas personas, sus familiares y la dignidad que recuperaremos revisando nuestro pasado, trabajando en el presente y mirando hacia un futuro más justo».
Un monolito para el recuerdo permanente. Al finalizar el acto, que se cerró con la interpretación del Cant dels Ocells por parte de Nuria Sotomayor, fue el concejal de Cultura, Vicent Granel, quien agradeció «el trabajo de tanta y tanta gente». También lo hizo extensible a los artistas Juan Poré y José Ferrer, presentes en el acto, por diseñar un monolito «que simboliza los pilares sobre los que asentar un sociedad más democrática y justa».
