El Ayuntamiento de Castelló ha cuadruplicado las inversiones en los últimos cuatro años. El análisis de la liquidación de los presupuestos entre 2013 y 2017 pone de relieve el esfuerzo realizado en estos momentos para impulsar proyectos de mejora de la ciudad. En 2013, el volumen de inversión alcanzó los 4,52 millones de euros, frente a los 17,05 millones de 2017, según los datos oficiales de la contabilidad municipal al cierre del ejercicio.

«La gestión económica ha sido una prioridad desde el primer momento», indica la alcaldesa, Amparo Marco. «Después de muchos años de desgobierno de la derecha, con falta de control presupuestario y gasto desaforado, el gobierno progresista tenía el gran objetivo de poner orden en la economía municipal y lo hemos hecho con una gestión ética, transparente y eficaz».

El incremento de las inversiones en este cuatrienio ha sido de un 277 %, una cifra que, a juicio de Marco, representa la labor de saneamiento y ajuste realizado en la gestión del presupuesto, «pero sin que el rigor haya supuesto menos inversión, al contrario». En 2014, las inversiones fueron de 5,07 millones; en 2015 llegaron a los 5,33 millones y 5,87 en 2016. El gran esfuerzo inversor se realizó durante el ejercicio 2017.

La eficiencia en la gestión ha estado acompañada por un incremento de los ingresos municipales por la actividad económica y las transferencias de fondos recibidos de otras administraciones, ya que los principales impuestos locales han sido ajustados a la baja. Es el caso del impuesto sobre construcciones, instalaciones y obras (ICIO), cuya recaudación aumentó el año pasado en 1,2 millones de euros a causa de la reactivación económica.

El saneamiento financiero, el rigor en la gestión de las cuentas públicas y la mejoría de la recaudación han permitido «reorientar el gasto municipal hacia las políticas que buscan reducir la desigualdad social con inversiones dirigidas a atender las necesidades de las ciudadanía, en especial de aquellos que han sufrido las consecuencias de la crisis y quienes tienen menos oportunidades y menos bienestar», afirma la alcaldesa de Castelló, Amparo Marco.

Los resultados económicos de los tres ejercicios contables con el bipartito han deparado, además, un superávit millonario. Las dificultades para destinarlo a otros fines, ha obligado al ayuntamiento a amortizar la deuda heredada de la etapa anterior, aunque una parte de los remanentes se ha podido destinar a las denominadas inversiones financieramente sostenibles, que no generan gasto de mantenimiento.