Joan Esteva entrenó al Castellón en el comienzo de la temporada 2014-15, y al Sant Andreu en la siguiente. Este curso vivió en el Narcís Sala, al mando del Europa, un duelo de rivalidad y solera, el otro derbi de Barcelona. Sigue desde la distancia la actualidad de los albinegros y conoce de primera mano las virtudes y las carencias del Sant Andreu. Los dos equipos se cruzarán el domingo en Castalia en la ida de la semifinal por el ascenso y Esteva, que los considera «muy parecidos», vaticina una eliminatoria «muy igualada».

«Mi sensación es que será todo muy igualado», explica Esteva, «porque son los dos han sido segundos, los dos tienen plantillas similares, con experiencia atrás y calidad arriba, y querencia por el juego directo, y ambos van a priorizar ser sólidos y tratar que no les hagan daño». La solvencia defensiva ha sido el mayor argumento del Sant Andreu para lograr el subcampeonato. También para pasar la primera eliminatoria, donde no encajó un solo tanto. «Tiene buenos jugadores: un portero y unos centrales correctos, laterales con experiencia. Suelen jugar con dos delanteros pero quizá en estos partidos uno de los dos se retrase un poco más».

Aparte de la similitud en la planificación de las plantillas, el ex entrenador albinegro señala lo parecido de los estilos de juego. «Aprietan mucho, tienen buen físico, circulan por detrás para buscar la mejor salida arriba». Apunta Esteva también alguna flaqueza («Si les quitas el balón sufren para tapar zonas laterales») y virtud («En estrategia son muy buenos»).

En cuanto al factor campo, Esteva considera que el Castellón puede tener incluso «una pequeña ventaja» al jugar la vuelta fuera. «El tanteo de la ida puede ser corto, y luego la importancia de cada gol crece por el valor doble en campo contrario», asegura, «en una eliminatoria que se puede decidir en los últimos minutos e incluso no me extrañaría que fuera a la prórroga». El Narcís Sala para la vuelta «se llenará». Esteva lo ha vivido como entrenador local y visitante. «Habrá un ambiente bonito en los dos partidos. En Sant Andreu no habrá tanta gente como en Castalia pero igual es una afición animosa, que empuja». La superficie es de césped artificial, «pero se puede jugar. Es un campo coqueto, más pequeño que Castalia, pero correcto en cuanto a dimensiones».

Corta estancia

Joan Esteva tomó las riendas del Castellón en el verano de 2014. Su estancia fue corta. Comenzó muy bien la temporada, con Roger Canadell al timón, y con el mejor arranque desde la campaña del récord de José Luis Oltra, pero la plantilla sufrió en paralelo numerosos cambios, y los resultados se resintieron. Tras la inyección del dinero de Aerocas, con la temporada en marcha se incorporaron hombres como Rubén Suárez, Javi Selvas, Albert Yagüe o Miki Martínez, futbolistas que llevaban tiempo parados y cuya inclusión en el equipo coincidió con una mala racha de resultados. De seis jornadas sin perder pasó a cuatro sin ganar. Esa transición se cobró la víctima habitual: Esteva fue destituido tras diez partidos de Liga, a cuatro puntos de la promoción. Le relevó Ramón María Calderé, que fue campeón y perdió después la promoción.