La comunidad de religiosas angélicas de Almenara abandonan el municipio después de 35 años. Las tres monjas que todavía residían en la casa del «carrer de Dalt», ya han abandonado la localidad. Precisamente, la fundadora de esta institución religiosa, Santa Genoveva Torres, nació en Almenara, municipio que ahora se va a quedar sin representación de las angélicas, al menos, de forma permanente.

Y es que, según detallan fuentes de la Diócesis de Segorbe-Castelló a Levante de Castelló, la comunidad parroquial de Los Santos Juanes de Almenara, y los vecinos y vecinas que lo deseen, seguirá contando con la visita periódica de la congregación que acudirán a la localidad desde València. Según las mismas fuentes, la comunidad parroquial de Los Santos Juanes de Almenara agradeció con una misa la presencia de la comunidad de religiosas angélicas durante 35 años en el pueblo natal de Santa Genoveva Torres. No obstante, «por razones de reorganización de la congregación», las tres hermanas que estaban en la población cambian de casa, pero «se asegurará una presencia periódica desde València», añaden fuentes de la diócesis. Marc Estela, vicario para el clero, participó en la celebración en representación del obispo Casimiro López Llorente.

Por su parte, el párroco Sergio Mendoza aseguraba en la homilía que era necesario «un acto de acción de gracias por su aportación». «Vosotras y tantas que os han precedido habéis ejercido una misión de entrega generosa que os agradecemos y por la que damos gracias a Dios», manifestó el cura de la localidad. Cabe señalar que las angélicas han participado en la pastoral de las personas mayores, la formación bíblica, la visita de enfermos o el cuidado de la liturgia a través del coro de mayores.

Acompañando a las religiosas también estuvo la superiora general, la madre María del Carmen del Amo. Las angélicas aseguran que la presencia no se va a perder ya que está previsto que desde la comunidad de València se vaya regularmente. De todos modos, admiten, habrá que esperar al capítulo general de este mismo mes para definir el modo de presencia.

Continuidad del Museo

En cuanto al museo de Santa Genoveva Torres, de momento, seguirá abierto a las visitas gracias a la colaboración de una feligresa. El párroco Sergio Mendoza concluía su homilía pidiendo a las religiosas que sigan «acompañando espiritualmente con su oración», y recordaba una cita de la santa: «Seguir el camino, por densa que sea la niebla, al lado de Jesús. Él será nuestro faro».

Un hogar para las mujeres que estaban solas

El instituto religioso de las angélicas fue fundado en 1911 con la finalidad de dar un hogar a las mujeres que estaban solas. El 2 de febrero de 1911 se inauguró la primera casa en València con cuatro residentes. La almenarense Genoveva Torres, que fue nombrada Directora de la Casa.

Paulatinamente crecen las fundaciones, en 1912 visten con hábito característico y en 1915 comienzan a consagrarse a Dios con votos privados. El 5 de diciembre de 1925 se promulgaba el Decreto por el que la Sociedad Angélica quedaba erigida en Instituto religioso diocesano.

Dos milagros para la beatificación de la religiosa

La religiosa Genoveva Torres Morales (Almenara, 1870-Zaragoza, 1956) fue beatificada por el Papa Juan Pablo II el 29 de enero de 1995 y canonizada el 4 de mayo del 2003 en la plaza de Colón de Madrid. Las dos curaciones que permitieron la beatificación de Genoveva Torres fueron la sanación de una hepatitis y una gangrena. Genoveva fue la menor de los seis hijos de José Torres y Vicenta Morales. A los ocho años, perdió a su padre y a cuatro de sus hermanos y se tuvo que hacer cargo de su hermano, José. A los trece años, se le diagnosticó un tumor maligno en una pierna y se la tuvieron que amputar. Caminaba con dos muletas.