«Estoy mucho mejor; espero llegar para el domingo». Estas fueron las palabras se Dani Raba ayer mientras abandonaba las instalaciones de la Ciutat Esportiva Miralcamp, tras recibir tratamiento de los fisios. No se entrenó junto al resto de compañeros, al igual que Manu Morlanes y Miguel Llambrich. Curiosamente, este último futbolista podría estar también a disposición del técnico Miguel Álvarez de cara al partido de vuelta de la segunda eliminatoria de la fase de ascenso a Segunda División. El Villarreal B recibirá al Fuenlabrada el domingo en el Mini Estadi, a partir de las 12.00 horas.
Son dos puntales importantes para el filial amarillo. El primero en tareas defensivas como es el lateral derecho Miguel Llambrich, que se ha perdido los tres últimos partidos, y el segundo es un mediapunta de grandísima calidad. Dani Raba ha jugado a un gran nivel en Primera con la primera plantilla y cuando ha bajado para jugar con el filial amarillo tiró del carro y además el equipo notó su presencia al tratarse de un futbolista que marca las diferencias.
En el caso de Miguel Llambrich, éste ayer cuando abandonaba la sesión de entrenamiento reconoció que «seguro al ciento por ciento no puedo garantizar nada, pero puede ser que llegue a tiempo. Luego decidirá el entrenador». Sería una buena noticia para el conjunto amarillo, pero en su contra tiene que el encuentro del domingo contra el Fuenlabrada es tan exigente que igual no se quieren correr riesgos. A su favor está el hecho de que es el único lateral del equipo y en estos últimos partidos el entrenador ha tenido que improvisar con el central Roger Riera como falso lateral.
A todo ello, el Villarreal está a la espera de una contestación del Comité de Competición de la FFCV porque ayer el club presentó las alegaciones pertinentes a la primera cartulina que vio el central Pau Francisco Torres en el minuto 16 de partido. Si no prospera la reclamación el joven zaguero sería baja para el duelo del domingo ante el Fuenlabrada.
El colegiado del encuentro
Francisco José Hernández Maeso, nacido en Bruselas (Bélgica) hace 29 años será el encargado de dirigir este domingo el Villarreal B-Fuenlanbrada que se disputará en el Mini Estadi. A los nueve años sus padres de afincaron en Badajoz, y pertenece a la delegación de la capital pacense. Suma en total ocho temporadas de experiencia en Segunda División B, donde ha impartido justicia en 100 partidos de Liga, con 547 amarillas y 39 rojas. Nunca le arbitró al filial amarillo y sí una esta campaña al Fuenlabrada, en el campo del Guijuelo (0-2).
