Sergi Escobar rezó en la última jugada del partido, ya en el tiempo de descuento, y acabó dando las gracias a sus jugadores por haberlo dado todo en un «partido de guerra, de locos». «Nos hemos defendido como unos campeones, los jugadores se han vaciado y esa es la actitud para poder ascender», explicó.

El técnico de Almassora reconoció al finalizar que se iba «contento» a casa tras sufrir el año pasado en Tafalla y comentó que «unas veces toca cara y otras cruz... Llegábamos con la ilusión de salir de una vez de este pozo. Ya está bien de sufrir. Hoy (ayer para el lector) hemos dado un paso importante pero no definitivo».