Dentro de exactamente un mes el recinto de concierto de Benicàssim abrirá sus puertas para acoger los primeros sonidos de una nueva edición, y ya van 24, del Festival Internacional de Benicàssim. Y en estos 30 días el Ayuntamiento de Benicàssim tiene que cerrar los contratos de alquiler de los terrenos del recinto que acogerá el FIB del 19 al 22 de julio.

Tal y como explicó el concejal de Urbanismo, Carlos Díaz, los contratos con los propietarios de los terrenos del recinto de conciertos han vencido y ahora se tienen que renovar. Para ello, desde el departamento de Urbanismo se ha trabajado en los precios máximos que se pueden fijar y como comentó el edil responsable «el acuerdo es un precio fijado a través de diferentes informes y dictámenes».

Como continuó explicando Carlos Díaz los precios establecidos para el alquiler de los terrenos se diferencia en el suelo que cuenta con infraestructuras (cuentan con agua, alumbrado y asfaltado), como es el del interior del recinto, y, por otro lado, el suelo que no cuenta con infraestructura, refiriéndose en este caso a los terrenos destinados a la zona de estacionamiento. En ambos casos, los precios «han aumentado un 5%», quedando establecido el precio de 2,10 euros el metro cuadrado en el suelo que forma parte del recinto del festival, y en 0,40 euros el metro cuadrado para la zona de aparcamiento. Un precio que como añadió el concejal Carlos Díaz, «es incluso superior al incremento del IPC».

En el caso de la zona de aparcamiento, el concejal de Urbanismo de Benicàssim informó que este espacio se va a ver este año ampliada al contar con más espacio cerca del acceso por la carretera del Desierto.

Por otro lado, Carlos Díaz comentó que el proceso iniciado para el alquiler de los terrenos tiene el objetivo de garantizar el solar donde se celebra tanto el FIB como el Rototom durante diez años, «un contrato a largo plazo que dará más seguridad, garantizará más estabilidad a los propietarios». Añadir que en ese mismo recinto se celebran festivales de menor envergadura como el SanSan Festival o el BEF.

Tras tener establecido el precio del alquiler, ahora es la concejalía de Festivales (desde alcaldía) quien se encargará de hablar con los propietarios de los terrenos y lograr llegar a un acuerdo con todos ellos para que no haya ningún problema en los días previos al inicio del FIB. Sin embargo algunos dueños de terrenos en esta zona ya han mostrado su desacuerdo al considerar que el precio es insuficiente. Los terrenos que acogen el festival suman más de 130.000 metros cuadrados.

En cuanto al alquiler de los terrenos en la zona de acampada situada junto al recinto de conciertos (conocida como Campfest) esta corre a cargo de la organización del Festival Internacional de Benicàssim y, como explicaron desde la misma, no hay ningún problema al respecto. Asimismo, desde el festival quisieron transmitir un mensaje de tranquilidad en cuanto a la continuidad del FIB en Benicàssim.