La cultura de la discrepancia, que defendió el pasado viernes Compromís en un acto político en Castelló, es la que ha permitido a su juicio llegar a acuerdos conjuntos entre los tres partidos del Pacte del Grau. El problema es que estas reflexiones a viva voz vuelven a dejar encima de la mesa que, en este año preelectoral que hay en el horizonte, las tres fuerzas del cambio empiezan a tomar posiciones.

La propuesta de Compromís, nada formal, de integrar en el gobierno local a Castelló en Moviment ha cogido por sorpresa a los socialistas, que no entienden cómo se puede lanzar este mensaje con apenas unos meses de gestión local, con las áreas ya definidas y con el trastorno que podría suponer ahora, a estas alturas, una hipotética reorganización municipal. Sí hubo en el pasado una propuesta formal de incorporar a la formación asamblearia, de hecho han sido constantes los guiños en diversos plenos y comparecencias, pero la realidad es que, con fecha junio de 2018, no hay propuesta conjunta del equipo de gobierno para que CseM se sume al gobierno local.

En la jornada de ayer las tres formaciones se vieron las caras en una de las diferentes reuniones que tienen para analizar el desarrollo del Acord del Grau y no hubo oferta oficial de PSPV y Compromís. Castelló en Moviment recogió el pasado sábado el guante lanzado por Compromís para sumarse al gobierno municipal, pero supeditó cualquier decisión a las hipotéticas condiciones que debían ponerse encima de la mesa.

La formación asamblearia consideraba que una propuesta de tal calado precisa de un foro adecuado, en referencia al anuncio realizado por la agrupación nacionalista, que tendió la mano con ocasión del cierre de la campaña «El motor del canvi» en un acto celebrado el viernes.

Según precisó CseM en un comunicado, «si es un ofrecimiento sincero, y no sólo fruto de la campaña de Compromís, esperamos que nos lo concretan en el marco de trabajo más oportuno para abordar conjuntamente los tres socios esta propuesta», algo que ayer, al menos oficialmente, no plasmó el gobierno local. Y eso que desde Castelló en Moviment se abrieron a valorar por parte de la asamblea de Castelló en Moviment «al igual que hacemos con todas las ofertas del gobierno».

De ahí, que Castelló en Moviment, según recoge una nota oficial, aseguró ayer que se «mantendrá trabajando allí donde sea más útil para mejorar la ciudad en cada momento», pero sin plantearse entrar en el gobierno. «Parece que la alcaldesa no desea cogobernar con Castelló en Moviment», precisa la nota. «Por tanto, la propuesta de Compromís transmitida e un acto de precampaña era solo una declaración no compartida con su equipo de gobierno», añade el comunicado de la formación asamblearia.

Como se recordará, el pasado viernes el portavoz de Compromís, Ignasi Garcia, señaló a la formación asamblearia que «la fuerza del cambio, el motor del cambio, lo puso en marcha Compromís en 2015 y no hay que esperar a 2019 para sumar brazos a este proyecto. Los cuatro concejales de Castelló en Moviment son bienvenidos y bienvenidas a trabajar para seguir haciendo políticas valientes desde el gobierno de nuestra ciudad».