«¡Nuestro pueblo está en fiestas! Hemos esperado todo un año para que llegara este momento. ¡Y nuestras fiestas en honor a Sant Joan ya están aquí!». Ese fue el mensaje con el que el alcalde, Vicente Pallarés, invitó a todos los vecinos a disfrutar de las fiestas patronales de la localidad. Y lo hizo desde el balcón del ayuntamiento, ante cientos de personas que se concentraron en la plaza, para vivir en primera persona el chupinazo que marca el inicio oficial de un intenso programa de festejos.

Las charangas y las peñas animaron tan multitudinario espectáculo, estallando en júbilo con la explosión del chupinazo y el disparo de la mascletà multicolor. A pie de calle, todos los vecinos pudieron tomar cerveza y sangría gratuitamente, para sofocar el intenso calor con el que Sant Joan de Moró recibió sus fiestas. «Somos un pueblo de puertas abiertas donde todos son bienvenidos», remarcó el alcalde quien, acompañado por los concejales de su equipo de gobierno, se encargó de repartir los pañuelos conmemorativos entre todos los asistentes.

El otro punto neurálgico de la fiesta de la primera jornada tuvo como protagonista la gastronomía con la inauguración tanto del Mesón de la Tapa como de la Muestra de la Tapa y la Cerveza. Bravas, calamares, embutidos, jamón, pulpo? y un sinfín de propuestas.

En la primera jornada de fiesta tampoco faltaron los toros. Por la mañana, encierro y por la tarde, los moreneros no faltaron a la cita taurina que preparó la peña La Unión. De rojo y blanco, los peñistas acapararon todo el protagonismo en el recinto taurino, que estuvo completamente abarrotado para poder disfrutar de Pecador e Ingeniero, astados de las ganaderías de Adolfo Martín de Escurial (Cáceres) y de Francisco Galache de Hernandinos de Villavieja de Yeltes (Salamanca).

El municipio celebra hoy el día del patrón con una misa y procesión, entre otros actos de carácter tradicional y religioso.