Los más pequeños se lo han pasado en grande durante estos días con «Benicàssim, ¡Torre a la vista!». La recreación histórica en la Torre de Sant Vicent resultó un éxito, de la que también pudieron disfrutar los más mayores. En total, se celebraron más de 40 actividades diarias, destacando los talleres y las artes piratas, así como las luchas de espadas entre los berberiscos y los habitantes del poblado. Representaciones de títeres, leyendas del mar o búsquedas del tesoro han sido otras de las actividades con las que se puso el valor histórico y patrimonial de la Torre Sant Vicent. Además, se realizaron visitas guiadas, culturales y cicloturísticas, sobre el funcionamiento del las torres vigía. Incluso los más atrevidos realizaron una travesía a nado, no competitiva.