Una joven relató ayer al tribunal, la sección 2ª de la Audiencia de Castelló, que su novio la secuestró cuando le comunicó que iba dejarlo. El fiscal pide para el procesado seis años de cárcel por detención ilegal.

Los hechos, según el escrito inicial de ministerio, público ocurrieron el 5 de diciembre de 2016 cuando el acusado fue a recoger a la víctima en la Universidad Jaume I, y se llevó a la joven a la fuerza hasta el domicilio de sus padres [del agresor]. Una vez, en la vivienda, cerró las puertas y las ventanas y desconectó la alarma. Más adelante ató de pies y manos y le apunto con una escopeta.

El fiscal también mantiene, que cuando llegaron los padres del acusado, el joven soltó las ataduras de la chica y la amenazó con matarlos a todos si les contaba algo de lo sucedido. La víctima logró salir de la casa escondida en el asiento trasero del coche la madre del acusado, que la estaba buscando con un cuchillo en la mano.

El procesado tenía en la casa un rifle, dos escopetas y una carabina, todas ellas con la reglamentaria licencia de armas.

El fiscal sostiene que cuando el agresor llegó con la chica a la casa de sus padres, «la condujo hasta su habitación y la lanzó sobre la cama, momento en el que la víctima comenzó a gritar. El acusado la ató de pies y manos con una cinta adhesiva al tiempo que le decía que no gritara ni hablara y le apuntó con una escopeta, manteniéndola en esta situación mientras decía que estaba seguro de que ella le había engañado con otros chicos durante su relación, llegando el acusado a girar el rostro de su pareja, en varias ocasiones, para obligarla a mirar el arma de fuego con la que le apuntaba», reseña el fiscal en su escrito.

En la vista oral, declararon, en calidad de testigos, las madres del agresor y de la víctima. La madre de la chica confirmó la versión ofrecida por su hija, mientras que la madre del agresor lo negó y señaló que su hijo «paso de agredido a reo».