La vicepresidenta del Consell y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, destacó ayer que la reversión al sistema público, desde el pasado 1 de julio, del CEEM de Albocàsser para personas con trastorno mental, supone «ir poniéndole músculo a la gestión pública de los servicios sociales».

La vicepresidenta del Consell ha señalado que los agentes sociales han recibido esta iniciativa con satisfacción y ha señalado que la reversión a lo público del CEEM de Albocàsser implica la mejora de los servicios y sus instalaciones, reforzando la calidad asistencial y la participación activa de las personas usuarias.

Concretamente, la Conselleria reforzará el transporte con la dotación de dos furgonetas que permitirán el traslado de los residentes para realizar actividades de inclusión social y trabajo en la comunidad, dado que el centro se encuentra ubicado fuera del núcleo urbano. Asimismo, se van a realizar una serie de reparaciones y mejoras en la habitabilidad de la residencia.

El centro de Albocàsser cuenta con 29 plazas residenciales y 5 plazas de centro de día y, según ha manifestado la vicepresidenta del Consell, el personal, que consta de una plantilla de 27 personas.