Pablo Herrera y Adrián Gavira celebran en este 2018 su décimo aniversario como pareja profesional, todo un hito. Desde que comenzaran su andadura juntos en 2008, el castellonense y el sanroqueño se han mantenido siempre en la élite mundial, llegando a disputar su torneo número 100 de World Tour en el Major Series de Gstaad (Suiza) esta misma semana, con un subcampeonato.

La medalla de plata en Suiza se añade a las cerca de 25 que acumulan entre Europeos y pruebas del circuito mundial de voley playa. «Nunca sabes cómo te va a ir con un compañero, pero después de diez años y cien torneos es bonito sumar una nueva medalla juntos. No es de oro, pero es igual de especial para nosotros», comentan los deportistas españoles.

Herrera-Gavira, además de haber participado en los Juegos Olímpicos de Londres y Río de Janeiro juntos (Pablo fue medallista en Atenas en 2004 y también compitió en Pekín), cuentan entre sus éxitos con el título de Campeones de Europa logrado en 2013 y también fueron campeones del Máster Europeo en Baden en 2009, en Blackpool en 2009 y en Biel en 2014. «Disfrutamos jugando juntos y queremos seguir haciéndolo cada año y en cada torneo. Somos como una familia y eso es es importante. Nuestra relación es más importante incluso que el deporte. Somos como hermanos», añaden.

Palmarés y retos

Además, en los últimos años el castellonense y el sanroqueño han logrado proclamarse vencedores en el Gran Slam de Moscú (2015), en el Open de Xiamen (2016) y hace apenas tres semanas en Ostrava (2018). Esta semana tratarán de pelear por otro título en Utrecht, donde arranca una nueva edición del Campeonato de Europa.