La primera etapa de montaña del Tour, celebrada ayer y que inauguraba el tríptico de jornadas en los Alpes, terminó con victoria del francés Julian Alaphilippe, pero no permitió resolver muchas dudas, con casi todos los favoritos entrando a más de tres minutos del vencedor.

A sus 26 años, Alaphilippe (Quick Step) logró el primer triunfo de etapa de un francés en este Tour de Francia, con llegada en Le Grand Bornand, solo dos días después de que la selección de fútbol de su país se proclamara campeona del mundo. Alaphilippe conseguía un triunfo de mucho mérito, después de haber peleado durante toda la etapa para meterse en la escapada buena y haber conseguido mantenerse en todo momento en la cabeza de una exigente etapa, sin perder la fe cuando Rein Taaramae gobernaba la carrera.

El galo alcanzó poco antes del penúltimo puerto de la jornada, La Romme, al estonio Rein Taaramae (Direct Energie), a poco menos de 30 km de la meta, para lanzarse hacia la victoria. El español Ion Izaguirre (Bahrain), que alcanzó a su vez a Taaramae, terminó en segunda posición (a 1:34), con el estonio tercero, seis segundos después.

El belga Greg Van Avermaet (BMC), cuarto en la etapa (a 1:44), mantuvo el maillot amarillo de líder, cuando todas las predicciones hablaban de que lo perdería en esta etapa de 158,5 km con salida en Annecy, con tres puertos de montaña de primera y uno de categoría especial.

Pero el belga estuvo atento desde el inicio de la etapa y se metió en una escapada poco antes del kilómetro 20 de carrera, dispuesto a no perder la primera posición de la clasificación general.

La jornada estuvo marcada por esa escapada de una veintena de corredores lanzada alrededor de la primera media hora de carrera, que afrontó el penúltimo ascenso, La Romme, con más de seis minutos de ventaja.

Todos los aspirantes al triunfo final, salvo el colombiano Rigoberto Urán, que entró a casi seis minutos del vencedor, al quedarse en la subida al último puerto de La Colombiere, llegaron en un pelotón de una veintena de ciclistas, a 3:23 de Alaphilippe.

Con este triunfo, el francés, que se hizo con el maillot de lunares de mejor escalador, logró su primera victoria en el Tour, en un año en que logró el primer puesto en la Flecha Valona y dos etapas del País Vasco y una de la vuelta Colombia Oro y Paz.