Marqués señaló que «desde el Ayuntamiento de Benicàssim no tuvimos conocimiento de la visita del presidente al FIB a pesar de que ahora, sabemos por la vicepresidenta que sí fue una visita de su agenda oficial». Por tanto, «lamentamos que su presencia no nos fuera comunicada oficialmente, como sería de esperar cuando el presidente de nuestra nación acude de manera oficial a cualquiera de los municipios de nuestro país» añadió la primera edil.

Marqués pidió a Sánchez que intervenga en la agilización de los proyectos que preocupan a Benicàssim. «Estos asuntos pendientes pasan, entre otros, por la demanda, respaldada por todos los grupos políticos con representación en el ayuntamiento, de que sea el Gobierno quien asuma los costes de amortización de la construcción de la planta desaladora de Orpesa que se ejecutó en tiempos de José Luís Rodríguez Zapatero.

En aquellos momentos, otras plantas similares construidas en Cataluña, recibieron un trato más beneficioso para los ciudadanos ya que fue el Ministerio quien asumió todos los gastos de edificación. Por tanto, los benicenses «no merecemos un trato distinto al que se dio a los municipios catalanes», señaló la alcaldesa.