La tramitación del nuevo Plan General de Ordenación Urbana de Castelló es el gran reto de la legislatura municipal para recuperar el marco jurídico urbanístico en la ciudad. No obstante, esa tramitación es un proceso largo que vivió la semana pasada un paso clave con la aprobación preliminar del Documento Pormenorizado, que sumó tres votos a favor y una abstención de Castelló en Moviment, después que el Gobierno se comprometiese a incorporar todas las medidas recogidas en el documento de síntesis del PGOU presentado en noviembre y pactado por la formación asamblearia con PSPV y Compromís. «Esperamos que el gobierno cumpla su palabra, rectifique e incorpore las reformas urbanas a las que se comprometió», explica Anna Peñalver, portavoz adjunta de Castelló en moviment.

Según informan desde la formación, el Plan General se encuentra ahora en el inicio de la exposición pública del Documento Pormenorizado y la recepción del dictamen jurídico sobre las alegaciones presentadas en el Documento Estructural. Al proceso todavía le quedan meses de trabajo institucional por delante, durante los que Peñalver confía en que «el resultado de esos planos sea una base para dar un giro de 180 grados al modelo de ciudad heredado por el Partido Popular», explica la portavoz adjunta del tercer firmante del Pacte del Grau.

Entre las medidas recogidas como prioridades políticas en el documento de síntesis y que se han quedado colgadas en el Documento Pormenorizado, tal como informó Levante de Castelló, Castelló en Moviment lamenta que se haya quedado fuera «las apuestas por una nueva movilidad centrada en los peatones, los ciclistas y el transporte público con el diseño de súper-islas por la ciudad que limiten los viales rápidos dentro de los barrios, los parkings periféricos disuasorios para que la gente que llegue a la ciudad no se mueva por el centro en coche; o la apuesta por la construcción de una vila verda, con una anilla verde, el Parque Agrario, o los conectores ecológicos en enclaves de alto valor, como la conexión Lledó, Parque del Meridiano, o la Marjal con el Ullal de la Comare», reseña Peñalver.