Almuerzos populares, cenas de sobaquillo, torneos de guiñote, verbenas, bingos, etc. Esta semana de agosto se caracteriza porque todo el mundo está de fiesta, todos, hasta los que no disponen de un pueblo en el que refugiarse y pasar el mes de agosto cada año.
En los alrededores de Castellóla segunda semana de agosto es sinónimo de festivo popular. Las urbanizaciones, los apartamentos y las villas se organizan y ofrecen sus particulares programas con todos los actos que conforman las fiestas de cualquier localidad de la provincia.
Se aprovechan las piscinas de los apartamentos para hacer aquagym, se montan castillos hinchables para los más pequeños, se ofrecen espectáculos de magia o se organizan torneos de naipes. Las festividades se centran en gustar a todos los públicos y se tienen en cuenta a los más pequeños y a las personas de la tercera edad, por eso se programan todo tipo de actos, desde los juegos más tradicionales hasta fiestas en piscinas pasando por los habituales bailes nocturnos.
En las urbanizaciones de Benicàssim, como la de Formentor II, los vecinos se unen y montan comidas populares, meriendas de 'horchata y fartons' o incluso verbenas y discomóviles. Todo el mundo contribuye y las fiestas se financian directamente con el dinero del grupo de vecinos.
En otros puntos más lejanos de Benicàssim pero que también tienen muchos habitantes en los meses veraniegos, como el Tossal Gros, se hacen comidas populares, fiestas de disfraces y verbenas. Además, los vecinos se implican positivamente en los actos montando comisiones que se financian con las barras en las discomóviles y con el dinero que cada 'mecenas' particular quiera aportar a la causa común.
Habitualmente, estas fiestas de barrios comienzan el segundo fin de semana de agosto y van variando durante estos días, pero suelen tener entre sus fechas clave la festividad de la Asunción que se celebró ayer. Muchas familias y grupos de amigos tienen la tradición de ir a comer al Pinar del Grao en este día y pasar allí la tarde con una buena sobremesa.
Las paellas o las parrillas de carne asada son los menús más habituales de la comida del día 15 de agosto en el Pinar. También se combate el calor con las cervezas o las sangrías caseras y los refrescos con mucho hielo que se llevan en las neveras de camping, elemento indispensable de este tipo de eventos como los termos de café o las hamacas.
De esta forma, gracias a que cada vecino aporta su grano de arena y a la voluntad de todo el mundo se consiguen unas buenas fiestas que unen a las personas y amenizan el mes de agosto en villas y apartamentos. En agosto especialmente, todo el mundo tiene derecho a pasarlo bien.
