El repunte de otros destinos ha frenado el crecimiento que ha registrado el turismo de Castelló en los últimos años. La patronal provincial (Ashotur) prevé una reducción de la ocupación hotelera en agosto -el principal mes de la temporada estival- de entre un 2 % y un 5 %.
Javier Gallego, integrante de Ashotur y portavoz del Club de Producto Introducing Castelló, explica que se produce un «efecto dominó» con la recuperación de mercados como los de Grecia, Túnez o Turquía, aunque puntualiza que en Castelló afecta de manera más suave que en otras partes de España. La ocupación en agosto prevista, según Gallego, rondará el 88 y 92 %, cinco puntos que en el anterior ejercicio. «Ahora hay plazas vacantes en todo Castelló», remarca.
Los precios, por su parte, añade Gallego, se han mantenido y no han tenido el incremento que se esperaba por el ajuste de la demanda.
Cabe tener en cuenta que la provincia registró récords en cuanto a la cifra de viajeros en 2016 y 2017. El objetivo de la Administración y empresarios es conseguir la desestacionalización del sector incrementando la llegada de viajeros extranjeros. El turista internacional apenas acapara el 20 %.
El último informe de coyuntura económica de la patronal autonómica (CEV) pone de manifiesto una disminución de un 3 % del número de turistas en el primer trimestre Castelló, mientras indica que el gasto global de los visitantes descendió un 16 % mientras el medio lo hizo en más de un 22 %.
