Castelló carece desde hoy hasta el 31 de agosto de conexión directa de AVE con Madrid y sin ocho Euromed de Barcelona. Asimismo, el Cercanías de València- Castelló circula estas dos semanas con la mitad de trenes, mientras este fin de semana se han de realizar transbordos en las estaciones de Sagunt y Estivella en el Cercanías C5 de València-Caudiel y en las terminales de Segorbe y Sagunt en el regional del Alto Palancia por obras en la línea València-Zaragoza.

Los usuarios de Castelló ven constreñida la posibilidad de viajar en tren en agosto. Las obras en el corredor mediterráneo y en la línea de Zaragoza aíslan prácticamente a la provincia por vía ferroviaria. Como alternativa están los autobuses lanzadera dispuestos por Renfe o el coche particular. Los turistas de Madrid pueden coger el AVE hasta València y luego dirigirse en autobús a Castelló. Lo mismo sucede con los viajeros de Castelló, que han de subir a un bus desde la estación de la capital de la Plana hasta València, tal como se pudo comprobar ayer. El itinerario de Castelló-Barcelona pierde durante 15 días cuatro Euromed por sentido, permaneciendo otras 9 conexiones (Euromed y Talgo) que para compensar refuerzan su capacidad.

El servicio de Cercanías València-Castelló consta hasta el 31 de agosto del 50 % de enlaces por el habitual plan de ajuste de verano, pero de los 40 trenes operativos por sentido la mitad finaliza en Puçol por las obras, desde donde el pasaje ha de utilizar un autobús.

Los recortes en las conexiones de Castelló con Madrid, Barcelona y València son consecuencia de los trabajos de la segunda fase del tercer raíl.

Por su parte, también se impulsa este fin de semana una reestructuración de frecuencias en el Cercanías C5 València-Sagunt-Teruel y en la media distancia València-Teruel por una actuación en la red entre València y Zaragoza. Ambas rutas circulan por municipios del Alto Palancia. En la C5 se ha de hacer transbordo por carretera en las estaciones de Estivella y Sagunt, y en la regional, en Sagunt y Segorbe. Cabe recordar que la C5 transita por Soneja, Segorbe, Navajas, Jérica-Viver y en Caudiel; mientras el regional, en Segorbe y Barracas.

Las incidencias en el tramo del corredor mediterráneo llegarán a su fin en septiembre. Las obras del tercer raíl continuarán hasta el término de 2019, pero desde el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias descartan más afecciones en el tráfico ferroviario porque los trabajos se concentrarán por la noche.

En la primera fase del tercer raíl, que se desarrolló en 2015 y 2016, el Ministerio de Fomento optó por prescindir del 50 % de trenes por las obras. Habilitó autobuses como alternativa pero que solo conectaban Castelló con Sagunt y València y eludían el resto de poblaciones de la C6. El entonces departamento de Ana Pastor barajó una restricción total de la circulación entre Castelló y València, pero finalmente se echó atrás por la presión empresarial, que alertó de daños incalculables en el tráfico de mercancías.

El turismo y la línea de Vinaròs

La patronal turística aguarda la próxima ampliación de trenes de la línea de Castelló a Vinaròs. Afirma que el impacto turístico del AVE es limitado con el norte de la provincia al terminar en la capital de la Plana, pero vaticina un revulsivo en la llegada de visitantes en el incremento de frecuencias entre Castelló y Vinaròs, que pasarán de cuatro a doce. Los primeros viajes se esperan para otoño. La firma entre Fomento y Renfe apunta para septiembre.