El Villarreal se encuentra a diez días del cierre del mercado de fichajes para incorporar al menos un medio centro más como consecuencia de los problemas físicos de Bruno Soriano y Javi Fuego.

Desde el club castellonenses se apunta que se realizar este fichaje se daría más como un cesión que una compra, para no realizar un desembolso fuerte, al tiempo que se debate la posibilidad de incorporar un jugador en la zona defensiva.

El capítulo que puede haber quedado cerrado es el de las salidas, tras la cesión del delantero Enes Ünal y el centrocampista Leo Suárez al Valladolid, que sumadas a las cesiones de Denis Cheryshev, Roberto Soriano o Adrián Marín, y la venta de Samu Castillejo, cierran ese capítulo.

La otra posible salida era la de Nicola Sansone, ya que cerrado el mercado italiano, no parece fácil encontrarle acomodo. A lo que se suma que el técnico Javier Calleja ya habló de que puede ser un jugador válido para el equipo.