Sube la población de origen rumano en la provincia de Castelló por primera vez desde los últimos años de la crisis, momento en el que se produjo el mayor éxodo de ciudadanos de Rumanía. El presente 2018 significa un cambio en la tendencia, ya que la población rumana no dejaba de disminuir desde el año 2012, en el que se encuentra el pico de inmigración rumana en Castelló, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

La población rumana en la provincia a 1 de enero de 2018 es de 38.377 personas según el INE. En 2017 era de 38.133 ciudadanos de origen rumano. Aunque de momento la subida es muy moderada, se prevé que el dato sea más alto en próximas estadísticas.

«Hemos notado que este año muchos rumanos han vuelto a Castelló», cuenta el cónsul de Rumanía Dragos-Viorel-Radu Tigau. «La razón es la expansión económica que está habiendo en España después de la crisis».

El momento en el que más inmigración rumana hubo en la provincia fue el año 2012, con 57.129 ciudadanos rumanos según el INE. Desde entonces las cifras solo tuvieron tendencia a la baja hasta caer en casi 20.000 personas la población rumana el pasado año. En 2013 había 54.907; en 2014, 45.710 (bajada más importante); en 2015, 42.458 y en 2016, 40.726. Como se ha dicho más arriba, en 2017 las cifras continuaron a la baja hasta el cambio de tendencia que se ha dado este año. En el pico de población rumana, el 2012, llegaron a representar el 10 % de la población total de la provincia.

«Los inmigrantes rumanos que vienen ahora tienen un perfil profesional distinto», cuenta Tigau, «en los años previos a la crisis venían trabajadores no cualificados que se dedicaban a la construcción, eran temporeros de agricultura, iban a las fábricas de azulejos, se ocupaban de trabajos domésticos, del transporte o de la hostelería. Ahora no, los inmigrantes rumanos que vienen suelen tener estudios superiores y buscan un empleo que tenga que ver con ellos», explica el cónsul. «Entre los nuevos perfiles profesionales hay trabajadores de la banca, médicos, abogados, etc.», cuenta Tigau.

Laura Ioan, vicepresidenta de la Asociación de Rumanos en Castelló, respalda esta afirmación. «Los rumanos que vienen ahora a España tienen más información que tenían cuando fueron las primeras migraciones, en los años del boom inmobiliario». Ioan destaca que, actualmente «los inmigrantes de Rumanía no hacen como se hacía entonces que era subirse a un autobús y buscar lo que sea para trabajar».

Tigau también destaca que muchos trabajadores rumanos están empezando a invertir en crear empresas porque tienen la intención de quedarse a vivir. «La mayoría de rumanos que están de vuelta ahora no solo están de visita a los familiares, sino que adquieren propiedades porque quieren quedarse». La inmigración rumana ya lleva mucho tiempo viniendo a España, por esto Ioan explica que «dentro de nada estaremos hablando de la tercera generación de rumanos en España». La vicepresidenta de la Asociación de Rumanos de Castelló afirma que «ahora no se viene a ganar un poco de dinero y volver a Rumanía, sino que el objetivo es quedarse en España».