Un norovirus transmitido por consumo alimentario es el causante del brote de gastroenteritis detectado el pasado 28 de agosto en un hotel de Benicàssim y que dejó un centenar de personas afectadas.

Así lo confirmó ayer la Conselleria de Salud Universal y Salud Pública tras la investigación epidemiológica iniciada para esclarecer la causa y que se ha prolongado durante varios días.

«Es un norovirus, cuya transmisión se produce a través del consumo de algún tipo de alimento y del contacto entre personas afectadas», explicaron fuentes de Sanidad.

La Conselleria de Sanidad especifica que el brote se ha producido por el consumo de algún alimento «pero no se puede confirmar de qué tipo».

Destacaron que la colaboración entre Salud Pública y el recinto «ha sido clave para frenar el brote y que no se produjeran más contagios».

El brote afectó a un centenar de personas, tres de las cuales ingresaron en el Hospital General Universitario de Castelló, aunque fueron dadas de alta a los pocos días. Cabe recordar que el paciente que quedaba ingresado ya fue dado de alta la semana pasada, según informaron el lunes desde el departamento de Ana Barceló, que destacaron entonces que se había registrado un descenso observado en la curva epidemiológica en la localidad benicense, lo que indicaba «que las medidas adoptadas han sido eficaces».