El Villarreal B buscará esta tarde sumar la primera victoria de la temporada 2018-19. Pero hay un problema: le visita el Alcoyano. Y eso es sinónimo de dificultad máxima. Es cierto que las estadísticas están para romperse, pero están ahí y vienen a indicar que la escuadra blanquiazul alicantina de sus diez visitas al campo del filial ganó en seis ocasiones, y empató dos. Es decir, que la suerte sólo le sonrió dos veces a la escuadra de la Plana Baixa que viene de realizar un partido completo en Castalia contra el CD Castellón (1-1).

Para los muchachos de Miguel Álvarez llega la hora de la verdad. Después de dos derrotas (Lleida y Hércules) y un empate (Castellón), buscan sumar el primer triunfo y convertir esas buenas sensaciones que depararon poco beneficio, en una victoria vitamínica. El Alcoyano tampoco es que haya estado excesivamente fino. Allí, en Alcoi, se lamentan de la falta de acierto rematador (tres goles en tres partidos).

Para esta cita el Villarreal B podrá disponer del delantero burgalés Mario González, que se lesionó en el Martínez Valero de Elche en el partido de ida de la final por el ascenso a Segunda. Se rompió el quinto metatarsiano de la pierna derecha y desde entonces no ha vuelto a jugar. No estarán los lesionados Sergio Lozano, Adrián Riera y Emmanuel Lomotey.

Las dos victorias del filial amarillo contra los alicantinos en el Mini fueron en categorías diferentes. La primera en Segunda B la temporada 2007-08 por 2-0, con goles anotados por Xisco Nadal y José Andrés Suanes, y la segunda fue en Segunda la 2011-12 por 4-3, con goles de Fernando Llorente, Porcar, Edu Ramos y Juanto.