El partido de esta tarde entre el Villarreal y el Rangers ha sido declarado de alto riesgo y, para evitar cualquier tipo de incidente antes, durante o después del encuentro en el Estadio de la Cerámica, el club de la Plana Baixa ha decidido seguir las instrucciones de la Policía Nacional y ha optado por tomar una serie de medidas especiales.

Y es que la previsión que tienen es que desembarquen en la provincia más de 2.000 aficionados, entre los que podría haber miembros de «The blue order», los seguidores más radicales del club británico, conocidos por los múltiples conflictos que han ocasionado en sus desplazamientos por Europa (hoy llega un chárter con 200 seguidores escoceses al aeropuerto de Castelló).

Así, además de que no se han vendido entradas por Internet para este encuentro (solo pueden adquirirse en las tiendas oficiales y son nominativas), tampoco habrá disponibles para las personas con nacionalidad británica. Quedará prohibida la entrada al Estadio de la Cerámica de aficionados visitantes que lleven entradas o abonos pertenecientes a zonas de afición local y los seguidores del Rangers solo podrán presenciar el choque desde la Grada Visitante. De este modo, el Villarreal controlará que no haya aficionados de ambos equipos mezclados en la grada.

Asimismo, la entidad que preside Fernando Roig se reserva el derecho de ejercer las acciones oportunas con aquellas entradas o abonos de temporada que intenten ser utilizados por seguidores del Rangers, pudiendo ser retirados en las puertas de acceso al estadio.