El portavoz del Grupo Municipal Socialista (GMS) de Alcalà de Xivert y Alcossebre, Joan Ronchera, afirmó ayer que «gracias a la presión del PSPV-PSOE durante más de tres años, en el pleno del próximo miércoles 26 de septiembre, se va a producir una nueva bajada del IBI». Será la segunda «a pesar del desmedido ímpetu recaudador del alcalde del PP, Francisco Juan», indicaron desde la formación socialista.

Ronchera explicó que desde que la actual corporación inició su mandato a mediados de 2015, «los socialistas hemos solicitado una rebaja de este impuesto en reiteradas ocasiones porque no tenía sentido que el tipo de gravamen que aplicaba el ayuntamiento rozara el máximo legal permitido».

Así mismo añadió que «nos parecía una barbaridad semejante carga fiscal en los momentos en los que la crisis azotaba con más virulencia a las familias y empresas de nuestro pueblo, teniendo en cuenta que las arcas contaban con una media de remanentes anuales de 1 millón de euros».

Los socialistas insistieron en que «a pesar de nuestras quejas, el alcalde, que tiene un afán recaudador desmedido, se mostró inicialmente muy parsimonioso a aliviar la presión fiscal».

Sin embargo, matizan, «la insistencia del Grupo Socialista dio sus frutos en 2018 porque la situación era ya insostenible y tamaña injusticia no se podía soportar, sobre todo después del catastrazo al que se sometió a nuestros vecinos», que aceptó el primer edil, Francisco Juan.