La participación de la ciudadanía en el proyecto resulta fundamental para implantar definitivamente el servicio en Castelló. Por el momento, existe un moderado optimismo después de los resultados obtenidos en la primera fase, en la que los castellonenses depositaron en el contenedor marrón más de 26 toneladas de residuos orgánicos hasta el pasado mes de junio.

Los recipientes se colocaron en la calle San Roque con Alcalde Tárrega, una parte del Raval Universitari y la zona centro, tres áreas que permitieron analizar las recogidas puerta a puerta, por carga lateral y por carga trasera con distintos tipos de contenedores.

Según apuntaron fuentes municipales, los datos de las recogidas alcanzaron los 26.460 kilos, en una prueba piloto que afectó a 7.651 habitantes. Por zonas, en la zona Sant Roc (Norte) se recogieron 12.080 kilos, en la zona UJI (Oeste), 9.200 kilos, mientras que en la zona Centro, que estuvo activa de marzo a junio, la cantidad recogida fue de 5.180 kilos.

Estudio de los pormenores

un estudio que analiza los pormenores de la obtención de este tipo de desechos en relación al entramado urbano, al tipo de residentes y a la capacidad de los camiones de recogida, con la intención de analizar su incorporación como un servicio más, añadiéndose a los tradicionales de plástico, cartón o vidrio.