Acabada la temporada turística estival, que suele dar el carpetazo en septiembre, el Ayuntamiento de Castelló ha abierto por tercer año consecutivo la playa reservada para el esparcimiento de los perros. La satisfactoria experiencia piloto de 2016 sirvió para que la ciudad destine durante casi seis meses una parte de su playa del Pinar al disfrute de las mascotas, tal y como señalan desde la concejalía de Salud Pública del Ayuntamiento de Castelló.

Este año la instalación vuelve a prepararse en la playa frente al Planetario, donde se ha habilitado un espacio de 3.500 metros cuadrados para el esparcimiento de los animales. «El Gobierno municipal es sensible ante una demanda social de muchos años y los perros tendrán de nuevo un zona acotada para disfrutar de las playas», afirma la concejala, Mary Carmen Ribera. La playa permanecerá abierta desde octubre hasta marzo, tiene acceso desde el paseo marítimo y se ha delimitado con un cordón de postes de madera. Dispone de duchas para los perros, bebedero, dispensador de bolsas para excrementos y papeleras.

Además, se han colocado paneles con las normas de uso como el horario, que se ha establecido entre las 7.00 y las 23.00 horas, y sobre la necesidad de que se respete una zona de paso de cuatro metros desde la orilla para compatibilizar el uso por parte del resto de usuarios de la playa; así como la obligación de recoger los excrementos de los perros y depositarlos en la papelera, y que los perros potencialmente peligrosos lleven bozal.

Además, desde el consistorio municipal se recuerda que los propietarios son responsables de los daños que pueda causar el animal y se pide que no se generen molestias al resto de usuarios, así como que no se utilicen detergentes en la ducha.