Las ayudas a la dependencia y su tramitación, lenta y hasta exasperante en los últimos años para las familias, parece ir ganando en agilidad, para satisfacción de los afectados. El dato, llamativo, lo aporta el concejal de Bienestar Social del Ayuntamiento de Castelló, José Luis López, quien asegura que en la actualidad se ha conseguido que las familias puedan comenzar a recibir las ayudas que han solicitado en un plazo en torno al medio año desde el inicio del expediente.

El vuelco es notable ya que, según los datos aportados por el consistorio, lo habitual hasta 2015 es que las familias tardasen de 6 a 8 años en percibir las ayudas solicitadas, una situación denunciada de forma sistemática por las plataformas y colectivos en defensa de las personas con dependencia. Ahora, según las mismas fuentes, «se tarda de 6 a 8 meses desde que se empieza el expediente hasta que las familias reciben lo que les corresponde».

Esta media oscila en función también de lo que se ha solicitado y la velocidad de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas, gestionada por la vicepresidenta del Consell, Mònica Oltra, que es la que resuelve definitivamente y concede las ayudas.

También es importante reseñar que el número de personas que analiza los expedientes ha aumentado de forma significativa ya que Castelló dispone en la actualidad de 12 trabajadores sociales que, al margen de otras cuestiones del departamento, trabajan al detalle en la valoración de todos los casos que llegan al ayuntamiento.

Por lo que respecta al número de expedientes nuevos iniciados en 2018, son ya 708 los que maneja el consistorio local. El perfil de las demandantes, según las mismas fuentes, es el de personas mayores en su inmensa mayoría, pero también hay casos de niños menores que sufren patologías, «y estos casos se priorizan», señala el concejal de Bienestar Social, José Luis López.

Según el edil, «gracias al ayuntamiento se están resolviendo en 6 u 8 meses los expedientes. Nuestra participación ha supuesto un enorme esfuerzo pero ha permitido agilizar estos procesos. Por tanto, si se ha beneficiado a la ciudadanía es positivo», comenta.

A nivel autonómico, el pasado verano la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas dio también una lectura positiva de los cambios en la gestión de las ayudas. Así desde el mes de enero hasta finales de agosto se habían registrado 13.890 solicitudes de reconocimiento de dependencia, el triple respecto a la cifra registrada en el mismo periodo de tiempo en 2016 y un 10 % respecto a 2017.

Los cambios introducidos en la gestión de la dependencia se traducen, según Mònica Oltra, en un incremento de las valoraciones de resolución de expedientes. Oltra destacaba además que el sistema de atención a la dependencia de la Comunitat está a punto de llegar a las 70.000 personas, recordando que cuando en julio de 2015 tomó posesión de esta conselleria había 45.000 personas a la espera de entrar dentro del sistema de protección a la dependencia.

El objetivo de la vicepresidenta del Consell y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas es que a finales de 2018 la Generalitat esté «al día» en el cumplimiento de la Ley de la Dependencia.