Javier Moliner se refirió ayer a la polémica entre la Diputación y el Ayuntamiento sobre qué institución debe pagar la reforma del pabellón polideportivo Pablo Herrera del Grau de Castelló. La instalación es propiedad de la diputación pero la explota en régimen de cesión el consistorio. «Lo más importante que deben saber los ciudadanos es que el Ayuntamiento puede empezar las obras del Pablo Herrera cuando quiera, y si no han comenzado es porque no quieren», dijo.

Sobre las cancelaciones y retrasos del servicio de Cercanías, Moliner señaló: «He mantenido contactos con Renfe trasladándoles mi preocupación», señaló E instó al PSPV a mantener una postura coherente en esta materia. Había algunos que ayer ponían el grito en el cielo cuando se retrasaba un cercanías y hoy callan silentemente y sumisamente ante su gobierno central», apostilló.